LOS TORITOS DE PUCARÁ
Una de las figuras más representativas de la artesanía en el Perú es, sin duda, el torito de Pucará. Si bien comenzó a elaborarse en Santiago de Pupuja, se le denomina de Pucará porque en este lugar se le empezó a comercializar. Pero en realidad la figura es producto de un largo proceso evolutivo, que se remonta al período clásico de Tiahuanaco, en cuya cerámica se puede apreciar vasos con la figura de un puma con algunos rasgos camélidos. Posteriormente, en el horizonte Huari, la figura se convierte en una alpaca estilizada. Se trata ahora de una conapa, es decir, de una especie de dios tutelar. Durante la Colonia la conapa en forma de alpaca se sigue elaborando, pero se le ha agregado algunos adornos. A principios del siglo XIX las conapas comienzan a elaborarse en forma de toro, aunque sin las patas, y a fines del mismo siglo la figura del toro es más completa, aparecen patas de regular tamaño y el morrillo. La última etapa evolutiva se dio a principios del siglo XX cuando la figura del torito de Pucará aparece completa, tal y conforme se comercializa hoy en día.