Lima, 20 de Diciembre del 2024.-El cierre fiscal es un momento crucial en cualquier país de América Latina, ya sea para trabajadores, PYMES o grandes empresas. Más allá de cumplir con obligaciones tributarias, representa una oportunidad para evaluar el desempeño financiero, construir una base sólida y establecer metas para el próximo año. Países como Chile, Argentina y Uruguay presentan contextos y normativas particulares que deben considerarse al llevar adelante este proceso.
Un reciente estudio de Mercer sobre el bienestar financiero reveló que el 70% de los trabajadores siente preocupación y estrés al manejar sus finanzas, y un 14% admite que este estrés les afecta incluso durante el sueño (ver estudio completo). Este fenómeno no es exclusivo de Chile; en países como Argentina, las altas cargas impositivas y los constantes cambios normativos generan una presión similar en los hogares y empresas.
Esta condición de “estrés financiero” tiene múltiples causas y efectos directos en la salud y calidad de vida de las personas. Un estudio de las universidades de Illinois, Michigan y Bruselas (2022) lo define como una forma de ansiedad generalizada que afecta tanto la salud física como psicológica (consulta el estudio).
Por otro lado, el estudio de Mercer reveló que solo el 43% de los trabajadores realiza periódicamente una contabilidad mensual de sus gastos, contra un 16% que no la realiza nunca.
Realizar un balance financiero eficaz es clave para el éxito empresarial. Según DeNegocios.cl, “llevar una contabilidad es necesario para aprovechar oportunidades de crecimiento, evitar problemas legales con el SII y construir un estado financiero saludable”.
El Banco BBVA recomienda como acciones principales para cerrar el año fiscal de forma efectiva:
En Chile, la Ley de Cumplimiento de Obligaciones Tributarias, que tendrá plena vigencia en 2025, incluirá reformas significativas como:
Para más información, consulta el detalle en el sitio oficial del SII: SII Chile – Noticias sobre cumplimiento tributario.
El cierre fiscal no debe verse solo como un trámite, sino como una oportunidad para planificar y fortalecer las finanzas personales y empresariales en toda América Latina. Con herramientas adecuadas y el apoyo de expertos, los desafíos del cierre fiscal pueden convertirse en un paso hacia un futuro financiero más estable y prometedor.