Las enzimas recombinantes, en combinación con la criolipólisis y otras aparatologías, ofrecen una opción segura y eficaz para la reducción de medidas, adaptándose a las necesidades específicas de cada paciente
Lima, 28 de Diciembre del 2024.- La Medicina Estética sigue avanzando con tratamientos de vanguardia como las Enzimas Recombinantes, que han revolucionado el manejo de la reducción de medidas mediante biotecnología. Este tratamiento no quirúrgico es una alternativa efectiva y segura frente a procedimientos invasivos como la liposucción.
La doctora Etoile Silveira, especialista del Centro de Medicina Estética de la Clínica Ricardo Palma, explica que las enzimas recombinantes son proteínas producidas en laboratorio mediante ingeniería genética. Este método garantiza pureza, especificidad y eficacia, minimizando riesgos asociados.
Uno de los componentes principales de las enzimas recombinantes es la lipasa, una enzima que descompone las células grasas sin necesidad de intervención quirúrgica. Su aplicación mediante microinyecciones permite tratar áreas como abdomen, brazos, cintura, caderas, muslos, contorno mandibular y papada.
A diferencia de los procedimientos quirúrgicos, este tratamiento destaca por su seguridad y puede combinarse con criolipólisis para maximizar resultados. Además, los protocolos se personalizan según las necesidades del paciente.
Protocolo y resultados
Generalmente, se recomiendan de 3 a 4 sesiones, realizadas cada 15 días, complementadas con:
Una dieta baja en carbohidratos y lácteos.
Una rutina de ejercicio.
Los resultados varían según la zona tratada y las características individuales de cada paciente.
Recomendaciones para el éxito del tratamiento
Para garantizar resultados óptimos, la doctora Silveira aconseja:
Evitar el ejercicio físico durante las primeras 48 horas tras el tratamiento.
No exponer la zona tratada al sol durante 48 horas.
Mantenerse hidratado con un consumo adecuado de líquidos.
Gracias a los avances en el campo de la biotecnología, este procedimiento tiene mínimas contraindicaciones, como el embarazo. Sin embargo, es imprescindible una evaluación clínica previa y que el tratamiento se realice exclusivamente en centros autorizados por profesionales capacitados, garantizando seguridad y calidad en cada sesión.