El carcinoma hepatocelular, que constituye el 90% de los casos de cáncer de hígado, se diagnostica en etapas avanzadas en el 50% de los pacientes
Lima, 24 de Diciembre del 2024.- Las fiestas de fin de año son sinónimo de celebración, reuniones familiares y deliciosos banquetes. Sin embargo, también representan un reto para nuestra salud, especialmente para el hígado, que es clave en procesos como la desintoxicación y la digestión.
El Dr. Javier Díaz, Jefe del Servicio de Hepatología del Hospital Rebagliati, advierte que las excesivas calorías, azúcares y grasas consumidas durante estas fechas pueden agravar condiciones preexistentes como la cirrosis, diabetes o hígado graso, aumentando el riesgo de carcinoma hepatocelular (HCC), un cáncer de hígado que representa el 90% de los casos oncológicos de este órgano.
En el país, la incidencia del HCC es de 5.4 casos por cada 100,000 habitantes, con más de 2,000 diagnósticos anuales según el Ministerio de Salud. El 80-85% de los casos ocurre en personas con cirrosis, y el diagnóstico tardío es común: más del 50% se detectan en etapas avanzadas, reduciendo drásticamente las opciones de tratamiento.
“Las personas con factores de riesgo, como antecedentes de hepatitis o cirrosis, deberían realizarse ultrasonidos y pruebas de alfa fetoproteínas cada seis meses”, recalca el Dr. Díaz.
Para prevenir complicaciones hepáticas, el especialista recomienda una dieta balanceada que promueva la depuración y el óptimo funcionamiento del hígado.
Las verduras, frutas, especias, frutos secos, frijoles y granos integrales, que aportan fibra, antioxidantes y nutrientes esenciales, destacan entre los alimentos más beneficiosos.
Cantidades moderadas, de lácteos, aves, huevos y mariscos también forman parte de esta alimentación, ofreciendo proteínas magras y grasas saludables.
Seguir un enfoque similar al de la dieta mediterránea favorece la salud hepática y contribuye al bienestar general y a la prevención de enfermedades crónicas, así como, optar por métodos de cocción saludables: al horno, a la plancha o al vapor, evitando el uso excesivo de grasas en la preparación de los alimentos. Además, el especialista recomienda complementar esta dieta con una adecuada hidratación, incluyendo infusiones de jengibre o té verde, que puedan potenciar la depuración del hígado y mejorar su funcionamiento.
Cabe resaltar que el hígado, es el segundo órgano más grande del cuerpo, importante por su capacidad para desintoxicar, almacenar nutrientes y producir bilis para la digestión. “El cáncer de hígado es prevenible y detectable con chequeos regulares. Es fundamental no ignorar los síntomas ni descuidar los controles, especialmente en personas con mayor riesgo”, concluye el Dr. Díaz.