Lima, 12 de Diciembre del 2024.- Esta disciplina científica es fundamental para el éxito de cualquier proyecto minero, ya que establece las bases de las estrategias de exploración. Un análisis deficiente en esta etapa puede conducir a errores costosos y asignaciones ineficientes de recursos hacia áreas con bajo potencial.
Los avances en Machine Learning han transformado este campo, proporcionando herramientas que procesan grandes cantidades de datos de manera más eficiente y precisa. Sin embargo, su implementación enfrenta retos únicos debido a la naturaleza específica de los datos de exploración mineral.
Flujo de trabajo para machine learning en exploración
1. Validación de datos iniciales: Se asegura la calidad de los datos eliminando inconsistencias y errores que puedan comprometer los resultados. Los datos no confiables o irrelevantes se descartan para evitar resultados engañosos.
2. Marco geológico confiable: Se generan interpretaciones sólidas de dominios geológicos, estructurales, metamórficos y geoquímicos. Estas interpretaciones, basadas en datos de campo y herramientas geofísicas, sirven como base para una extrapolación confiable en el espacio tridimensional.
3. Datos tridimensionales: Los datos deben estar estructurados en un espacio tridimensional con ubicaciones específicas y áreas por explorar, asegurando que las distancias representen tamaños ideales para perforación.
4. Redistribución de datos: Herramientas geostadísticas y de inversión geofísica redistribuyen los datos más allá de su ubicación inicial, respetando los límites definidos previamente.
5. Validación y pruebas: Se reserva un subconjunto de datos para probar el modelo y evitar el sobreajuste. Este conjunto debe capturar los principales tipos de litología, alteración y mineralización.
6. Entrenamiento del algoritmo: Otro subconjunto de datos, equilibrado entre ejemplos positivos y negativos, se utiliza para entrenar el algoritmo y clasificar bloques entre mineral y desperdicio.
7. Optimización del modelo: Los datos se ingresan al algoritmo, optimizando la clasificación.
8. Evaluación del rendimiento: Las predicciones del modelo se comparan con los datos de prueba para medir su efectividad, evitando métricas basadas en datos de entrenamiento.
9. Validación experta: Un profesional en exploración revisa las predicciones para identificar inconsistencias relacionadas con la realidad geológica.
10. Aplicación del modelo: Una vez validado, el modelo se extiende al resto del conjunto de datos.
11. Selección de objetivos finales: Se eligen los objetivos de perforación más prometedores basados en sus probabilidades de éxito, alineados con los objetivos de la campaña.
12. Ejecución y retroalimentación: La campaña de perforación sigue directrices expertas. Los datos obtenidos, incluso de perforaciones fallidas, retroalimentan el modelo, reiniciando el proceso desde el paso 1.
El Machine Learning también se aplica para identificar anomalías desconocidas en grandes conjuntos de datos. Mediante algoritmos supervisados, se entrena al modelo para detectar anomalías conocidas y luego se utiliza para identificar patrones no evidentes. Esta capacidad de analizar múltiples atributos simultáneamente supera las limitaciones humanas, permitiendo una comparación efectiva de varias capas de datos y la detección de objetivos sutiles en un espacio multidimensional.
El potencial del Machine Learning radica en su capacidad para automatizar procesos complejos, explorar bases de datos masivas y discriminar objetivos específicos con mayor precisión. Esta tecnología ofrece una herramienta poderosa para mejorar la eficiencia y reducir los riesgos en la exploración minera, sentando las bases para un futuro más preciso y rentable en el sector.
Fuente: Tecnología Minera