En pleno invierno limeño, cuando el frío se intensifica, el emoliente se presenta como un tesoro cultural que nos reconforta. Esta emblemática bebida, elaborada con cebada, linaza, cola de caballo, hierba luisa, manzanilla, cedrón, piña, membrillo y manzana, cocidos durante horas en agua, se presentará en la feria “Perú Mucho Gusto”, organizada por PROMPERÚ en colaboración con la Municipalidad Provincial de Tacna del 26 al 28 de julio en Tacna.
Esta bebida tradicional que no sólo proporciona calor corporal, sino que también forma parte de nuestra historia y puede prevenir diversas enfermedades gracias a su mezcla única de hierbas y esencias está presente desde el Virreinato. En esa época, las ’tisaneras’, mujeres ambulantes que recorrían las plazas de la ‘Ciudad de los Reyes’, llevaban ollas de barro llenas de infusiones medicinales, marcando el inicio de una tradición que hoy en día es parte esencial de la vida urbana. peruano.
Según el historiador Juan Luis Orrego Penagos, desde la colonia existen registros de una bebida hecha a base de cebada que se vendía en Lima. Viajeros del siglo XIX también mencionaron su presencia en la capital. El doctor en Ciencias Químicas, Alberto Sánchez Alvarez-Insúa, subrayó que los españoles introdujeron el agua de cebada en América, marcando el inicio de la evolución del emoliente tal como lo conocemos hoy. Cada sorbo de esta bebida en las calles de Lima es, por tanto, un encuentro con la historia y la tradición.
Con el paso del tiempo, esta bebida destaca no solo por su combinación única de hierbas medicinales y su sabor reconfortante, sino también por los beneficios para la salud que ofrecen sus ingredientes. Entre ellos:
En resumen, el emoliente es un verdadero elixir de salud que encapsula siglos de historia y sabiduría. Los visitantes a la feria “Perú Mucho Gusto” podrán disfrutar de sus diversas variedades y ese calor reconfortante que ofrece con cada sorbo.