El rey de la máxima competencia Europea volvió a dar un golpe sobre la mesa y se metió en su final número diecinueve, que se dice pronto pero es una auténtica barbaridad.
Y nuevamente de la manera mas inesperada aunque esto es un decir porque para los aficionados en el Bernabeu no porque hasta el último minuto saben que el milagro en el caso del Real siempre es posible.
El cuadro blanco salió con todo en busca de romper el empate que se logró en el Allianz Arena y a punto estuvo de hacerlo en los primeros minutos gracias principalmente a Vinicius Jr quien hizo pedazos la defensa Alemana.
Antes de los 13 minutos estrella un balón en el parante que luego Rodrygo no fue capaz de hacer ingresar al arco de Neuer.
El Bayern logra salir del acecho inicial a partir de los 20 minutos y hasta logró crear cierto peligro en el área blanca teniendo en los pies de Kane su mas clara ocasión siendo desviada por Lunin que apenas lograba intervenir en el partido.
En las postrimerías de la primera parte el gran portero Alemán salva un remate envenenado de Vinicius y estuvo a punto de irse con ventaja al descanso.
Para el segundo tiempo se intensifica el asedio merengue que no parece dispuesto a llevar el partido mas allá de los 90 minutos.
Vinicius que fue con diferencia el mejor jugador de toda la serie se vuelve una pesadilla para Kimmich que se encontró enormemente superado por el jugador Brasilero una y otra vez a lo largo del juego y en la vereda de en frente otro personaje que se iba convirtiendo en la figura del partido el portero Neuer que fue la explicación por la cual el resultado seguía igualado.
Con dos atajadas espectaculares en poco mas de un par de minutos bloqueó un tremendo tiro libre de Rodrygo y un remate frontal de Vinicius que iban directamente al fondo del arco.
Pero lo mejor estaba todavía por llegar, en una de las cada vez mas aisladas llegadas del cuadro visitante Davies recibe un pase largo de Kane y con un remate cruzado vence la portería de Lunin.
Balde de agua fría que obliga a Ancelotti a hacer cambios y luego de un gol anulado por falta de Nacho encuentra la paridad tras el único error de Neuer y Joselu muy atento factura.
Pero la épica llegó dos minutos mas tarde cuando el propio jugador blanco logró su doblete que vale por un pasaje a la final.
Y así volvimos a tener una noche mágica en el Bernabeu que pone al Real Madrid ante la posibilidad de agrandar aún mas su leyenda sobre el campo del mítico estadio de Wembley el 1 de junio.
Escrito por: Alejandro Rozas / Foto: Afp.