Jueves, 21 de Noviembre del 2024
El jefe de los mercenarios de Wagner, Evgeny Prigozhin, ha muerto este miércoles al estrellarse su avión sobre la región rusa de Tver, al norte de Moscú. Prigozhin figuraba como pasajero en el avión, según ha confirmado la Autoridad de Aviación Rusa. Su número dos, Dimitri Utkin, también estaba a bordo. El grupo Wagner le ha dado por muerto. “El héroe de Rusia, el verdadero patriota de su patria, murió como resultado de las acciones de los traidores de Rusia. ¡Pero incluso en el infierno, él será el mejor! “, se leía en un mensaje en Telegram del Canal Grey Zone que pertenece a los mercenarios.
El avión, en ruta de Moscú a San Petersburgo, la localidad natal de Prigozhin, transportaba a siete pasajeros y tres tripulantes, informó TASS. Según los canales Mash y Baza el ataque terrorista a bordo se considera una posible causa del accidente. Los servicios especiales han abierto una investigación. Además, varios medios informan que durante el vuelo se escucharon dos fuertes explosiones en el cielo.
“Se ha iniciado una investigación sobre el accidente del avión ocurrido esta tarde en la región de Tver. Según la lista de pasajeros, entre ellos están el nombre y apellido de Evgeny Prigozhin”, señalaba poco antes el departamento de Rosaviatsiya.
A bordo del avión estrellado estaba también su segundo, Dimitri Utkin. También, el camarógrafo de Prigozhin, un ayudante del grupo Wagner y sus guardaespaldas. Una fuente del canal de televisión ultraconservador Tsargrad afirma que los cuerpos de Prigozhin y del comandante de Wagner Dimitri Utkin, fueron “identificados preliminarmente”.
La muerte de Prigozhin no sería una sorpresa para nadie”, afirmó antes la Casa Blanca. “Pocas cosas suceden en Rusia sin el conocimiento de Putin”, añadió por su parte el presidente de EEUU, Joe Biden.
El canal de Telegram Gray Zone, cercano a Wagner, afirma que el avión de Prigozhin fue derribado por fuego de defensa aérea. El pueblo de Kuzhenkino, en la zona donde se estrelló el jet, se encuentra a sólo 50 kilómetros de la residencia de Vladimir Putin en Valdai, quien casi a la misma hora se encontraba participando en una ceremonia oficial para celebrar el 80 aniversario de la Battalla de Kursk, una de las más importantes de la Segunda Guerra Mundial. En su discurso en esa región, fronteriza con Ucrania, Putin ensalzó a quienes “combaten con valentía y determinación”. “
Tras conocer el suceso, allegados a Prigozhin confirmaron que no podía contactar con él. El jefe mercenario voló hoy a Rusia desde África, acompañado de todo el equipo directivo de Wagner, según medios rusos. Desde su entorno reaccionaron a las primeras noticias: “Será un milagro si está en otro avión”.
En el lugar del accidente se encontraron ocho cadáveres; casi todos sufren graves quemaduras; lo más probable es que sea necesario realizar pruebas de ADN para establecer sus identidades.
El avión era un Embraer Legacy 600. Desapareció del radar a una altitud de 8.500 metros, su velocidad era de aproximadamente 950 kilómetros por hora. A las 18.20 (las 17.30 hora de Madrid) los controladores aéreos intentaron contactar con la tripulación pero fue en vano.
El gobernador de la región de Tver, Igor Rudenya, asumió el control de la situación tras el suceso. Según aclararon en el gobierno de la región, al lugar se desplazaron agentes del orden y del Ministerio de Situaciones de Emergencia, para establecer los detalles del incidente y también especificar el número de muertos.
Prigozhin, de 62 años, y cuya milicia privada Wagner ayudó a las fuerzas rusas en Ucrania, lideró el pasado junio una rebelión armada fallida contra el Kremlin y la jerarquía militar. Tras mediar en el conflicto el mandatario bielorruso, Aleksanser Lukashenko, el jefe de Wagner aceptó replegar a la mayoría de sus mercenarios. Y, el pasado julio, fue el propio Vladimir Putin quien ofreció a los combatientes la oportunidad de servir en el ejército ruso.
El presidente ruso siempre ha jugado al equívoco con sus mercenarios. La postura oficial del Gobierno durante años fue: “No tenemos responsabilidad sobre Wagner”. Pero con la ‘caída’ en desgracia de Prigozhin, Putin se cebó ante las cámaras aseverando que durante años el Kremlin le había “pagado” grandes sumas.
Los Wagner obedecen mal, pero mueren muy bien. En marzo, el Ministerio de Defensa del Reino Unido estimó que Wagner tenía 50.000 combatientes en Ucrania. El propio Prigozhin dijo en mayo que tenía 35.000 combatientes en el frente. Además, se le permitió reclutar 50.000 convictos de las cárceles.
Tras la rebelión fallida contra el Kremlin, el grupo de mercenarios habría reiniciado sus operaciones en África. Esta misma semana, Prigozhin había compartido en redes sociales un vídeo de reclutamiento en el que decía que Wagner hace “que Rusia sea aun más grande en todos los continentes”.
