Volodimir Zelenski en el Vaticano para reunirse con el Papa Francisco llegó poco después de las 16.00 horas, en un coche blindado, al patio del Aula Pablo VI. Sentados frente a frente, iniciaron su conversación, en presencia de un intérprete. El director de la Oficina de Prensa del Vaticano, Matteo Bruni, informó a los periodistas acreditados que “los temas de la conversación versaron sobre la situación humanitaria y política en Ucrania provocada por la guerra en curso. El Papa aseguró su oración constante, atestiguada por sus numerosos llamamientos públicos y su continua invocación al Señor por la paz desde febrero del año pasado. Ambos coincidieron en la necesidad de continuar los esfuerzos humanitarios para apoyar a la población. El Papa hizo especial hincapié en la urgente necesidad de ‘gestos de humanidad’ hacia las personas más frágiles, las víctimas inocentes del conflicto”.
El encuentro entre el Papa y el Presidente duró unos 40 minutos.
Después de reunirse con el Pontífice tuvo lugar el encuentro con el Secretario para las Relaciones con los estados y las Organizaciones Internacionales, Monseñor Paul Richard Gallagher, con quien “se abordó ante todo la guerra actual en Ucrania y las urgencias asociadas a ella, en particular las de carácter humanitario, así como la necesidad de proseguir los esfuerzos para alcanzar la paz”. La Oficina de Prensa de la Santa Sede informó también que “la ocasión fue propicia también para tratar algunos temas bilaterales, especialmente en lo que se refiere a la vida de la Iglesia católica en el país”.
Los regalos
El Papa Francisco donó a Zelenski una obra de bronce que representa una rama de olivo, símbolo de la paz. Junto a ella el Mensaje para la Jornada Mundial de la Paz 2023, el Documento sobre la fraternidad humana, el libro sobre la Statio Orbis del 27 de marzo de 2020, editado por la LEV, el volumen “Una encíclica sobre la paz en Ucrania” que recoge la mayor parte de los discursos públicos del Pontífice sobre la guerra en Ucrania. Significativos también los regalos entregados por Zelenski al Santo Padre: una obra de arte realizada con una placa antibalas y un cuadro titulado Perdita, sobre la matanza de niños durante el conflicto.
Reuniones con Mattarella y Meloni
Es la segunda vez que Zelenski viene al Vaticano; la primera había sido en febrero de 2020, cuando la amenaza de la pandemia del Covid-19 empezaba a cernirse sobre Europa y la guerra parecía un fantasma segregado sólo en el este de Ucrania. Un año y medio después del primer bombardeo ruso en Kyiv, entre llamadas telefónicas, cartas, llamamientos, contactos públicos y privados, Zelenski -ya no aislado como en los primeros meses del conflicto- ha vuelto a viajar y, en un itinerario que toca varias capitales europeas, hace una parada en Roma, donde vuelve a encontrarse con el Papa, que nunca ha dejado de ofrecerle su apoyo espiritual, su cercanía y también ayuda concreta y diplomática. Volodimir Zelenski llegó esta mañana a la capital italiana y anunció su llegada en Twitter etiquetando las cuentas del Papa y de la primer ministro, Giorgia Meloni y citando al Presidente Sergio Mattarella: “¡Una visita importante para acercarnos a la victoria de Ucrania!”, escribió. Meloni le recibió con un abrazo y prometió el “apoyo total” de Italia a Ucrania, en particular a sus iniciativas de exportación de trigo. El mismo apoyo reiteró Mattarella, que calificó de deleznable el secuestro de cientos de niños ucranianos en Rusia. “Nuestra victoria es la paz”, respondió el presidente ucraniano. Estas palabras también se repitieron en la rueda de prensa posterior, en la que Giorgia Meloni también agradeció “el compromiso del Papa y de la Santa Sede” para lograr la paz entre Ucrania y Rusia.