Fuente: Euronews – Marco Aquino y Diego Oré.
Lima, 20 de Diciembre del 2022.- Perú declaró el martes como “persona non grata” al embajador de México y le dio 72 horas para que abandone Lima por una “injerencia” en los asuntos internos del país, en una escalada de la crisis diplomática entre ambas naciones latinoamericanas por la destitución y arresto del expresidente Pedro Castillo.
La decisión del gobierno peruano se produce horas después de que México anunció que había concedido el asilo político a la familia del exmandatario Castillo, quien fue expulsado el 7 de diciembre tras intentar disolver de forma ilegal el Congreso y reorganizar el sistema judicial en la nación andina.
“El gobierno de Perú ha declarado persona non grata al embajador de México de Perú, Pablo Monroy Conesa, por las reiteradas expresiones de las altas autoridades de ese país sobre la situación política de Perú”, dijo la ministra de Relaciones Exteriores de Perú, Ana Gervasi, en un discurso.
La funcionaria dijo que se notificó “a la fecha” que el diplomático tiene 72 horas para abandonar el país andino.
En respuesta, el gobierno mexicano informó que había instruido a Monroy Conesa a regresar a México tras ser declarado persona no grata y que su embajada en Lima operará de forma normal.
“Encuentro esa decisión infundada y reprobable”, dijo el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, en su cuenta de Twitter sobre la decisión de Perú de expulsar al representante mexicano en Lima. “México no variará su posición”, sentenció.
México, Argentina, Colombia y Bolivia emitieron la semana pasada un comunicado conjunto indicando que Castillo había sido víctima de “hostigamiento” político desde que asumió el poder el año pasado y exhortaron al nuevo gobierno de Perú a “abstenerse de revertir la voluntad popular expresada” en las urnas.
El Gobierno de la presidenta peruana, Dina Boluarte, rechazó de inmediato esa posición y llamó en consulta a sus embajadores en esos países gobernados por líderes de izquierda por “la intromisión en los asuntos internos” del país andino.
El Gobierno del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, quien ha calificado la expulsión de Castillo como antidemocrática, ha sido el más crítico del nuevo Gobierno en Perú y no ha reconocido a la mandataria Boluarte.