Miercoles, 1 de Mayo del 2024
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Enfermedad de manos, pies y boca: ¿Cómo reconocerla y tratarla?

Publicado el 22/07/22

Esta enfermedad viral leve y contagiosa es más frecuente en niños menores de 5 años, que se
encuentran expuestos al contagio en guarderías, nidos, entre otros espacios compartidos y
recreativos, refiere la doctora María Ysabel Acosta, pediatra de la Clínica Ricardo Palma tras
señalar que dura de 7 a 10 días.
Se caracteriza por la aparición de llagas en la boca y erupciones cutáneas en las manos y en los
pies. Su causa más común es la infección con el virus de Coxsackie A16, transmitido
principalmente por vía oral y por el contacto con la persona infectada, a través de secreciones
nasales y de la garganta, saliva, líquido de ampollas, heces y gotículas esparcidas al toser o
estornudar.
El niño suele presentar fiebre, dolor de garganta, sensación de malestar general, ampollas en
lengua, encías y parte interna de las mejillas. Además de erupciones cutáneas que no
presentan escozor, lesiones en forma de llagas, sarpullido en manos y pies y, a veces, en
glúteos. El menor también puede mostrarse irritable y con poco apetito.
Por lo general, esta afección puede tratarse en casa, siguiendo las indicaciones del médico de
cabecera. Es importante mantener al pequeño bien hidratado y con la fiebre controlada. Si el
niño no toma suficiente líquido, no muestra mejoría luego de 10 días o los síntomas se
acentúan o tiene menos de 6 meses, hay que llevarlo al centro de salud más cercano.
PREVENCIÓN
Para reducir el riesgo de infección se recomienda:
● Realizar un correcto lavado de manos, sobre todo, luego de ir al baño, cambiar el pañal
y antes de preparar los alimentos e ingerirlos. Complemente la desinfección con
alcohol.
● Si su bebé asiste a una guardería o nido, exija una limpieza y desinfección minuciosa de
las áreas comunes y objetos con los que tenga contacto, incluidos biberones o
chupones.
● Inculque buenos hábitos de higiene a su hijo desde pequeño, evitando que se lleve
objetos o las manos a la boca.
● No envíe a su niño al nido o guardería hasta que esté curado. De igual modo en casa,
extreme los cuidados ya que esta enfermedad es contagiosa.
● Si el chiquitín está infectado, ofrézcale alimentos suaves, que pueda comer fácilmente
y a temperatura ambiente.



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