Lima, 4 de Julio del 2022.- La Vitamina D que se adquiere principalmente mediante la exposición al sol tiene un papel importante en el sistema inmune y la salud del esqueleto humano. Cerca de 90% de este complejo vitamínico proviene de los rayos ultravioleta.
Para Samira García Hirsh, médica reumatóloga, la prevalencia del déficit de este componente es muy alto y común en las sociedades modernas porque la gente no sale a tomar sol durante 15 minutos, entre las 10:00 am y las 3:00 pm, mínimo 2 veces por semana, como recomiendan los especialistas. Esto representa un riesgo creciente. Los bajos niveles de esta vitamina en el cuerpo humano están asociados a enfermedades como la osteoporosis, raquitismo y osteomalacia.
La principal fuente de vitamina D se obtiene del sol. La gente que trabaja en las oficinas, con piel más oscura suelen absorber hasta un 99% menos de Vitamina D. Una persona obesa o una mayor a 70 años absorbe 75% menos. En Perú, las mujeres posmenopáusicas la deficiencia de vitamina D llega a ser de 90 o 95%. A nivel global uno de cada dos adultos y nueve de cada diez mujeres postmenopáusicas con osteoporosis presenta este tipo de deficiencia. En Perú y Latam es igual la tendencia.[1]
Por esto mismo, la especialista recomienda el consumo medido de suplementos vitamínicos a adultos jóvenes, mujeres embarazadas, mayores de 18 años. Pero, en especial, para mayores de 50 años, en dosis adecuadas.
García Hirsh señala además que el consumo del suplemento debe ser monitoreado y planificado de manera mensual, bimensual o trimestral según las necesidades del paciente. Ninguna dosis debería alcanzar las 600.000 UI por mes, porque han demostrado tener un efecto negativo en el esqueleto, así como un incremento en el riesgo de caídas, lo cual es contraproducente especialmente en pacientes con osteoporosis.
De acuerdo con la médica, la intoxicación por Vitamina D es muy rara, pero, de todos modos, resulta necesario indicar las dosis que sean eficaces y seguras, ya que cuando se alcanzan niveles de 150ng/ml en sangre ésta es tóxica.
Luego de la ingesta de una cápsula blanda de 100.000 UI es posible observar un incremento en los niveles, hasta alcanzar los niveles recomendados (30ng/ml).
Los síntomas que pueden indicar deficiencia de Vitamina D son cansancio, decaimiento, dolor muscular, dolor articular, dolor en zonas como región lumbar, caderas, infecciones respiratorias a repetición y disminución de la tolerancia al ejercicio.[2]
[1] Declaraciones basadas en los datos presentados durante la entrevista con Samira García Hirsh-Médica reumatóloga.
[2] Declaraciones basadas en los datos presentados durante la entrevista con Samira García Hirsh-Médica reumatóloga.