8M: EL APORTE DE LAS MUJERES EN EL SECTOR AERONÁUTICO
Según información de la Sociedad Internacional de Mujeres Piloto de Aerolíneas del 2021, en el mundo, las mujeres piloto representan aproximadamente el 5.1% del total de pilotos comerciales activos.
En Perú, la estadística nacional es de alrededor de 5.5% de mujeres pilotos comerciales en actividad, una cifra que se ha visto incrementada en cerca de 1% desde el 2019.
Lima, martes 08 de marzo de 2022.- La figura femenina es un ejemplo de lucha y prosperidad, alcanzando cada vez más participación en el mundo laboral peruano con un 44.3% de la Población Económicamente Activa en el 2021, de acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística e Informática – INEI.
Hoy, Día Internacional de la Mujer, se conmemora la lucha de las mujeres por su participación en la sociedad y por la igualdad. Afortunadamente, es posible decir que en los últimos años son cada vez más las organizaciones que están buscando equidad en sus equipos, y el mundo aeronáutico no es la excepción.
Mujeres en el corazón de la industria aeronáutica
Tradicionalmente, la aviación ha sido catalogada como una industria “para hombres”, debido principalmente a que la profesión nace de la carrera militar, en donde la participación femenina prácticamente no existía y haciendo que se perciba como extraño ver una mujer en la cabina de mando de un avión hasta hace unas décadas.
Participación femenina
Según información de la Sociedad Internacional de Mujeres Piloto de Aerolíneas del 2021, en el mundo, las mujeres piloto representan aproximadamente el 5.1% del total de pilotos comerciales activos. Los porcentajes de participación varían por país, siendo India donde más mujeres hay en las cabinas de mando con 15% y Singapur, uno de los países con menor participación con 1%.
En Perú, la estadística nacional es de alrededor de 5.5% de mujeres pilotos comerciales en actividad, una cifra que se ha visto incrementada en cerca de 1% desde el 2019, pese a la pandemia.
Aviadoras que hicieron historia
En un mundo que era conquistado por hombres, varias mujeres aviadoras hicieron historia, logrando sentar las bases para una industria en la que la mujer ha probado que cuenta con las mismas capacidades.
Raymonde de Laroche, la primera aviadora de la historia coincidentemente recibió su licencia un 8 de marzo de 1910 del Aéreo Club de Francia. Gracias a ello, fue la única mujer entre varios hombres en volar aviones, en una época en la que era extraño que algo así ocurriese.
Amelia Earhart fue la primera mujer aviadora en cruzar el Atlántico sola en 1932, llegando en 14 horas y 54 minutos desde Terranova hasta un pastizal irlandés; todo esto desafiando un contexto altamente machista.
Maria Del Pilar Del Águila es la primera Instructora de Simulador de Sudamérica, con lo que ha contribuido en la formación y en la obtención de licencias de vuelos de muchos pilotos en nuestro país. Además, es inspectora designada, por lo que está autorizada por la DGAC para realizar chequeos a los pilotos de SKY para la habilitación y renovación de sus licencias como pilotos comerciales.
SKY quiere invitar a más mujeres a que se “atrevan a volar” superando barreras y estereotipos. Con ello, la aerolínea espera aumentar la participación femenina en diferentes posiciones y niveles jerárquicos de la aviación pronto.
La low cost ha logrado un equipo con 46% de mujeres, 42% en puestos gerenciales y 50% en jefaturas; cifras que son especialmente importantes en un país en el que se dice que la figura femenina es alta en los primeros escaños de las compañías, pero va disminuyendo en la medida en que la jerarquía va aumentando.
Además, en Perú mantiene un 10% de mujeres en la cabina de mando, una cifra que -si bien es mejorable-, casi duplica la media del mercado nacional y busca mejorarse con el compromiso que la compañía mantiene hace años de dar las mismas oportunidades a las mujeres en el rubro.
Si bien aún existen muchos aspectos por trabajar para alcanzar la paridad laboral, la industria aeronáutica viene contemplando iniciativas internas y externas para captar más talento femenino, ayudada siempre del sector formativo, en donde cada vez se ven más egresadas mujeres.