Rivera se ha convertido en una figura clave de la rehabilitación deportiva en el continente, desde su base de operaciones en Miami. Por sus manos expertas han pasado estrellas como Andrés Guardado, Miguel Rojas, Rodolfo Pizarro, Lourdes Gourriel, Alí Sánchez, Luis Avilán, Manuel Viniegra, Víctor Mesa Jr, entre otros.
“No tenía ninguna molestia, pero quería mejorar mi flexibilidad. Mejoré bastante el hombro. Gracias a Dios, no tenía dolor, pero sí estaba muy limitado”, indica Alí Sánchez, receptor de los Cardenales de San Luis en las Grandes Ligas de Béisbol.
Rivera, con solo 29 años de edad, es licenciado en Fisioterapia (México) y máster en Osteopatía (España), con destaque en las especialidades de kinesiología y entrenamiento atlético.
Para Víctor Mesa Jr., el astro cubano de los Miami Marlins, encontrarse con Rivera fue definitivo para su carrera. “Tenía algunos dolores viejos, y Jorge me los ha arreglado. Tengo 20 años, pero parece que volví a tener 16”.
Mesa jugó 111 juegos (de 116) y se mantiene “saludable, sin ningún dolor”.
“La vida de un pelotero es difícil. Es el deporte en que más partes del cuerpo tienes que usar, y Jorge me ha ayudado a fortalecer codos, tobillos y cadera”, reconoce Mesa.
El pitcher venezolano Luis Avilán, de los Nacionales de Washington, recuerda que se atendió con Rivera por una lesión en el hombro: “Me dijo que en una semana ya debería estar lanzando otra vez, cosa que me pareció un poco exagerado”.
“Pero, efectivamente, la terapia funcionó al 100 por ciento, y en una semana ya estaba lanzando otra vez. Desde entonces, siempre acudo a él cuando tengo alguna molestia física, porque en sus manos dejo todo lo que es el sentido de salud de mi cuerpo”, explica Avilán, quien anteriormente pasó por equipos como Bravos de Atlanta, Dodgers de Los Ángeles, Medias Blancas de Chicago, Phillies de Filadelfia, Mets de Nueva York y Yankees de Nueva York.
En México, el futbolista Manuel Viniegra García, de los Gallos Blancos de Querétaro, empezó tratándose una hernia deportiva con Jorge Rivera y luego puso en sus manos la rehabilitación.
“Tiene como unos métodos muy modernos, por así decirlo. No solo te ayuda a rehabilitar de algún dolor o molestia, sino que te ayuda a estar mejor físicamente en todos los aspectos. Mi rendimiento ha sido más activo, más potencia, más rápido, menos lesiones. Me muevo mucho mejor en la cancha desde que trabajo con él”, confiesa Viniegra.
“Agradezco las felicitaciones de estos grandes talentos del deporte. Mi trabajo es servirles, ayudarles a mejorar, aplicando siempre la ciencia y la experiencia. Estoy feliz de haberles ayudado en su carrera deportiva”, dijo Rivera.