La nueva prueba serológica detecta esos anticuerpos y permite saber si una persona ha estado en contacto con el coronavirus SARS-CoV-2 y si su sistema inmunitario ha reaccionado. La tecnología, que se presentó hoy en rueda de prensa en la sede principal del CSIC, ha sido ya validada por los servicios de Inmunología de varios hospitales (La Princesa y La Paz, ambos en Madrid), y van a ser fabricados por una empresa española (Immunostep).
Los test serológicos, recordaron los responsables del CSIC, son fundamentales para determinar quién ha contraído el virus y si está inmunizado frente a él. El “Kit ELISA” se va a convertir, según los científicos que han participado en su desarrollo, en una de las tecnologías más fiables para la realización de test serológicos de la población, y se basa en procedimientos que ya se realizan de una forma habitual en muchos hospitales y laboratorios especializados.
Durante el confinamiento, cuatro grupos de investigación del Centro Nacional de Biotecnología trabajaron contra el crono para disponer de este tipo de test serológicos. Ese análisis, han subrayado hoy los investigadores y los responsables del CSIC y de los hospitales, es crucial en la gestión de la pandemia, ya que una gran parte de los contagiados por el virus cursan la enfermedad sin síntomas o de una manera muy leve.
En este empeño se involucraron los grupos de los investigadores del CSIC Hugh Reyburn, Mar Valés, José María Casasnovas y José Miguel Rodríguez Frade, que consiguieron identificar una nueva proteína que funciona como antígeno y combinarla con otros antígenos virales para completar este test serológico.
Existen dos tipos de diagnóstico: las “PCR”, que permiten saber si un paciente está contagiado por el coronavirus en el momento de su realización, y los test serológicos , que detectan anticuerpos y determinan si un individuo ha sido infectado con el SARS-CoV-2 y si su sistema inmunitario ha reaccionado frente al mismo.
Los test serológicos se realizan con muestras de sangre y detectan distintos tipos de anticuerpos (inmunoglobulinas): la IgM (inmunoglobulina M), la primera que se genera tras la infección e indica que la persona está iniciando la respuesta a la enfermedad; la IgG (inmunoglobulina G), se produce en un momento más avanzado de la infección e informa durante meses de que un individuo ha padecido la enfermedad; y la inmunoglobulina A (IgA), que se produce en estados tempranos, pero puede ser detectada también en fases tardías.
A diferencia de las PCR, el principal problema de los test serológicos -hasta ahora- es su poca fiabilidad, un problema que han resuelto los investigadores del CSIC, que ha protegido ya la nueva tecnología con una patente y la ha puesto a disposición del tejido industrial español, para evitar la dependencia de terceros países y conseguir que llegue cuanto antes a la sociedad.
Además de los “Kit ELISA”, la nueva tecnología se puede producir en un formato de “tiras inmunocromatográficas” (una técnica similar a la que se emplea en las pruebas de embarazo), que también se conocen como test rápidos de anticuerpos, ya que el resultado se genera en solo 15 minutos, y el CSIC está ya negociando con varias empresas españolas la licencia de estos test en este formato para cubrir toda la demanda y a un precio económico.