Venezuela muestra al mundo sus carencias mientras avanza los contagios del coronavirus. El pasado lunes, el país sudamericano reportó 36 personas con Covid-19, siendo Miranda, colindante con Caracas, el estado con más casos positivos confirmados. En apenas cuatro días, desde el viernes cuando se confirmaron los primeros dos casos, el coronavirus se ha propagado tan rápido que entre el domingo y el lunes se registró un aumento de 16 nuevos casos, según el informe del Gobierno chavista.
«Por cada caso conocido, hay 27 casos por conocer», dijo Nicolás Maduro, al informar que en Caracas se han detectado ocho casos mientras que Miranda reúne 13. Por esa razón, el régimen ha ordenado una cuarentena social en todo el territorio venezolano para contener la propagación del coronavirus y ha colocado puntos de control en los 24 estados del país para evitar el desplazamiento interno de las personas.
Y aunque el régimen de Maduro intentó prepararse antes de la llegada del coronavirus, su debilitado sistema sanitario ha hecho que la incertidumbre y la preocupación se disparen en menos de una semana. La pregunta que más resuena es «cuántos casos habrá realmente en el país», precisamente por la falta de transparencia con las cifras sanitarias -desde 2016 Venezuela no ofrecía boletín epidemiológico hasta este año que las publicó-, la falta de preparación por parte de las autoridades sanitarias y la decrépita infraestructura de los hospitales.
Médicos y enfermeras han denunciado en las últimas horas la falta de fármacos y equipos para atender a los enfermos. Pero Maduro sigue respondiendo que la crisis humanitaria y sanitaria de Venezuela es responsabilidad de las sanciones de Estados Unidos, al tiempo que la oposición se lo adjudica a las malas políticas y la corrupción dentro del chavismo.
Aún así, el chavismo no ha podido ocultar la dura realidad de los hospitales y la escasez del personal médico del país. El gremio de médicos y enfermeras ha dicho que el Estado no les ha garantizado condiciones de trabajo seguras e indicaron que en algunos casos han trabajado sin protección. Otros han decidido comprar sus propias mascarillas, que pueden llegar a costar 3 dólares cada una, un monto elevadísimo que representa más de la mitad del salario mensual.
La presidenta del Colegio de Enfermeras de Caracas, Ana Rosario Contreras, indicó ayer que conoce casos de contagio en el personal de enfermería por lo que exige «más protección y agua en los hospitales». Por su parte, el virólogo venezolano Julio Castro explicó en su cuenta personal de Twitter que en el país solo hay disponibles 84 camas con ventiladores en las unidades de cuidados intensivos del país.
Sin fármacos
La Encuesta Nacional de Hospital realizada por la organización de Médicos por la Salud arrojó que para 2019, la escasez de agua fue denunciada en el 70% de los hospitales del país, que tenían un servicio de agua intermitente ysolo contaron con ello una o dos veces por semana. Y antes de la aparición del Covid-19 en Venezuela, más de un 53% de los hospitales no contaban con las mascarillas que debe usar el personal médico para evitar contagios.
La escasez de medicamentos sigue ubicándose en el 80%. Maduro, por su parte, anunció el pasado jueves que su Gobierno contaba con 46 hospitales centinelas, pero no explicó dónde se encuentran estos centros de atención. No solo los hospitales sufren la crisis humanitaria, sino también las comunidades que, según la Asamblea Nacional, en más del 70% del país el agua llega cada 20 o 25 días, mientras que en otros lugares se habla de meses, por lo que las personas no pueden seguir las recomendaciones básicas de la Organización Mundial de la Salud que sugiere lavarse las manos frecuente para contrarrestar el contagio.
Préstamo al FMI
Por otro lado, y según informa Ludmila Vinogradoff, Maduro solicitó oficialmente al Fondo Monetario Internacional (FMI) un préstamo por 5.000 millones de dólares para fortalecer «las capacidades de respuesta de nuestro sistema de salud en la contención del coronavirus».Así lo confirmó el canciller Jorge Arreaza en Twitter. Maduro dirigió una carta a la directora del FMI, Kristalina Georgina, el domingo, en la que solicita una «evaluación, respecto la posibilidad de otorgarle a Venezuela una facilidad de financiamiento». Hasta ahora el FMI no ha respondido a la solicitud, con la que Maduro reconoce que Venezuela está quebrada después de 21 años de modelo socialista .
Por su parte, el presidente interino, Juan Guaidó, envió un mensaje la noche del domingo y aseguró que el régimen de Nicolás Maduro «debe entender que no tiene la capacidad de respuesta» en medio de la contingencia. Para el líder opositor, «no es momento para la soberbia, ni para la partidización de una emergencia en la que toca evitar una tragedia de dimensiones incalculables. El pueblo necesita nuestra ayuda, ustedes saben que requieren del apoyo que yo puedo conseguir de la comunidad internacional». Guaidó también anunció la entrega de 3.500 kits de protección para el personal de emergencia de los cinco principales hospitales de la ciudad de Caracas. Mientras tanto, Maduro anunció que en los próximos días llegará a Venezuela «un envío especial de China», con médicos, paramédicos, kits de pruebas del coronavirus y medicamentos para palear el virus.