Crónica por Hans-Peter Firbas. – el dos de enero de 1857 fue creado el distrito de Lurín. Hoy, 163 años después, sus habitantes, empresarios, comerciantes y pobladores de esta pujante ciudad, que ofrecen todo tipo de servicios y productos para sus coterráneos, empezaron a armar de a poco desde muy temprano de hoy jueves, sus puestos o negocios no sólo en busca de hacer caja, sino también de ser parte de las celebraciones que encabezará el multifacético y querido alcalde Juan Jorge Marticorena.
La labor al mando de la Municipalidad de Lurín que realiza el burgomaestre Juan Jorge Marticorena desde el 2019, se viene convirtiendo en un gobierno sui géneris, atípico y diría más bien yendo contra todas las corrientes de los demás estilos, estrategias o políticas establecidas en el resto del país. Gracias a la realización los días 16, 17, 18 y 19 de enero de 2020 del Lurín Pro 2020 COPA FLORIL, fecha válida del Campeonato Mundial de Bodyboarding APB, tuve la oportunidad de acercarme a este hombre bonachón, con ideas claras y simples a la vez, pero con conocimientos bien adquirido de la vida diaria, de la calle, para el manejo correcto de un distrito turístico – ecológico y deportivo.
Para poder escribir algunas líneas sobre este pedacito de nuestra querida nación, prendería mi máquina analítica empezando por enfocar mi punto de atención sobre una de las más grandes virtudes que debe presentar un servicio edil. La prioridad en la lucha por la educación, salud, alimentación y la práctica del deporte durante la etapa del desarrollo infante – niño – adolescente. O para ser más directo: ofrecer a sus vecinos la mayor cantidad de servicios necesarios y requeridos por ellos. Asesoría legal, médica, veterinaria, en fin, los servicios básicos para una vida mejor.
Este triunvirato en los primeros e importantísimos años de la vida de los seres humanos, marcará a los pequeños con un tatuaje permanente las condiciones en las cuales, -una vez adulto- se involucrará en la sociedad, llegando a convertirse en una persona positiva para la comunidad de la que formará parte. Marticorena ve las cosas claras, nada borrosas y sabe inclusive que en su propio mar está el arma perfecta para luchar contra la desnutrición infantil, es decir el consumo masivo de los pescados negros, como la sardina, el bonito, la anchoveta y otros, que dejará a los futuros habitantes de Perú fuera de los índices de mala alimentación
Gracias a las grandes figuras que existen en Lurín en el deporte del bodyboarding, Miguel Rodríguez, medalla de bronce en Los Juegos Mundiales ISA y premiado por el Presidente con los Laureles Deportivos, ya ha puesto en marcha La Escuela Municipal de Bodyboarding, como paso inicial en la implementación del deporte, como pilar y sustento para el futuro a mediano plazo en el desarrollo de Lurín.
Según el alcalde, su labor fundamental obligación no es gobernar para el día de hoy o para mañana. Su misión, nos cuenta, es transformar estructuralmente todo el distrito. Reflotar los deportes profesionales y devolverle al pueblo esas emociones de antaño. Paso a paso y con una política de análisis estructural avanza de la mano con el turismo, lo que generará hermandad con los vecinos de otros distritos y comunidades, proyectos asociados entre ellos y generará adicionales ingresos y empleos. Sin lugar a dudas, esto traerá un crecimiento a los residentes de Lurín y de sus negocios.
Lurín tiene una proyección ilimitada. Además de sus playas, que se encuentran muy bien cuidadas, limpias y con aguas en condiciones perfectas para aprovecharlas por no estar dañadas con tóxicos, ofrecen una variedad de condiciones. Pueden nadar, practicar surf, bodyboard y otros deportes más. Esta belleza costera se completa con campos verdes paradisíacos, como en Mamacona y también otras zonas arqueológicas en sus alrededores.
En este valle, que hoy lo conocemos como valle de Lurín, se encontraba el templo del dios creador, como lo denominaron las culturas pre incas, que luego fue conquistado por el Imperio incaico. Estos hombres primitivos en el devenir del tiempo fueron desarrollándose gracias a los ecosistemas que existían con su abundante flora y fauna, producto de ese entorno maravilloso que produce el medio ambiente.
El valle de Lurín que en estos tiempos era un jardín multicolor, que eran irrigados por el río Lurín y que, con sus cadenas de pequeñas montañas convertidas en Lomas, el verdor de sus campiñas y montes ribereños hacen de él, una alfombra verde y maravillosa con capacidad de extasiar a cualquiera que lo observara.
El desarrollo de estos hombres primitivos no se contuvo, prosiguió su rumbo y con la práctica de la agricultura, ubicamos asentamientos poblacionales con sus centros de culto en forma de herradura. Los complejos en forma de herradura del valle de Lurín, tiene gran importancia para la costa peruana, por el rol protagónico que desempeñaron en el proceso de desarrollo agrícola, en los tiempos iniciales.
Fue creado el 2 de enero de 1857 y desde entonces ha sido un distrito altamente agrícola por encontrarse predominantemente en el valle del río Lurín.
En esta zona de desarrolló un importante flujo de población desde la sierra por albergar a un centro ceremonial muy importante en la época de los incas ya que el santuario obedecía a la creencia de un dios llamado Pachacamac muy poderoso, relacionado con los movimientos sísmicos que sufre de vez en cuando este país. Este santuario no fue erigido por los incas sino adoptado por ellos dado su gran prestigio. Existía desde antes de los incas un importante señorío llamado Ichsma, que fue anexado al imperio tras su expansión.
Se practica el bodyboard, deporte vinculado al Surfing, sobre todo en las playas de Pulpos, Arica, San Pedro, que son playas ideales para la práctica de este deporte. Existe un club local del distrito llamado “Ola Fuerte” que organiza campeonatos cada cierto tiempo, invitando a deportistas de diferentes partes de Lima, e inclusive de otros departamentos del Perú, en este distrito, se han realizado campeonatos de bodyboard internacional, vóley playa, bádminton y fisicoculturismo.
Su gastronomía también llama la atención a los turistas que desean degustar comidas típicas del lugar como el chicharrón que se puede encontrar en Puente Lurín. También comidas marinas como el cebiche, arroz con mariscos y la leche de tigre, estas comidas se pueden degustar en las playas del distrito. La carapulcra y arroz con pato se pueden encontrar en la Plaza de Armas de Lurín donde también encontrarás la Catedral de Lurín.
La leyenda de los islotes de San Pedro cuenta esta leyenda que vivía en el valle de Lurín una hermosa muchacha, quien se había enamorado del dios Curinaya Wiracocha, quien dentro de sus excentricidades tenía por costumbre aparentar ser un pordiosero en las reuniones de los dioses hecho por lo cual lo apodaron el “Piojoso”. Siendo un día que Curinaya observaba a la linda muchacha, sin atreverse a confesarle su amor por temor a ser rechazado, decide convertirse en colibrí y dejar su semilla de vida en un fruto de lúcuma, del cual comió esta muchacha y en seguida quedó embarazada.
Con el tiempo el niño creció y al cumplir dos años ya la madre decidió que su hijo debía tener a su padre y es entonces que convoca a una reunión a los dioses para encontrar al padre de su hijo. Ya en la reunión los dioses le dijeron a la madre como haría para saber quién era el padre del niño. Entonces a la muchacha se le ocurrió que el niño por instinto debía saber, así que lo dejó en el suelo para que el hallara a su padre, acto seguido el niño se fue acercando lentamente al “Piojoso” Curinaya Wiracocha. Es así que la madre sorprendida por este hecho y dándole vergüenza agarra al niño y sale corriendo de la reunión no dándose cuenta que Curinaya Wiracocha se había transformado en su verdadera apariencia, un hombre fuerte y hermoso.