Lunes, 4 de Noviembre del 2024
El influyente diario El País de España sostuvo hoy que la crisis institucional que vive Perú debe resolverse siguiendo las normas constitucionales que avalan al presidente Martín Vizcarra en su decisión de disolver el Congreso y convocar elecciones legislativas, para que sean los votantes quienes tengan la última palabra en el rumbo político que debe adoptar el país andino.
“Perú vivía una parálisis legislativa provocada por el bloqueo de la oposición fujimorista —con mayoría en el Congreso— agravada, además, por el intento de esta de modificar la composición del Tribunal Constitucional mediante el nombramiento de magistrados afines”, indicó en su editorial El País.
Agregó que la presión fujimorista para esta modificación del TC se explica porque sus principales líderes son investigados en graves casos de corrupción que sacuden al país. “Entre aquellos destaca su lideresa, Keiko Fujimori, hija de Alberto Fujimori, quien gobernó Perú de manera dictatorial desde su autogolpe de 1992 hasta el 2000”.
Keiko Fujimori se encuentra en prisión preventiva desde octubre del 2018 acusada de lavado de dinero, procedente de los sobornos presuntamente hechos por la multinacional constructora Odebrecht para favorecer su campaña electoral del 2016.
Con su decisión, el presidente Vizcarra se ha ceñido a lo establecido por el artículo 134 de la Constitución peruana, que permite disolver la Cámara y convocar a la ciudadanía a las urnas cuando el Congreso rechaza tomar en consideración dos proyectos de ley del Gobierno, explicó.
No es un “golpe de Estado”, tal y como han acusado los fujimoristas, sino una salida legal y perfectamente legítima. En cambio, lo que sí es una ruptura institucional es la acción realizada por la oposición que, con el Congreso disuelto, votó la suspensión del presidente Vizcarra y su sustitución por la vicepresidenta, Mercedes Aráoz, indicó.
“Prueba de la tensión social innecesaria generada por la decisión fujimorista que amenazaba con crear en Perú una peligrosa dualidad institucional es que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional tuvieron que declarar públicamente su lealtad al presidente Vizcarra y que miles de personas se echaron a las calles por todo el país respaldando la decisión del Presidente”, refirió.
Consideró innegable que las condiciones en las que ahora los peruanos acudirán a las urnas no son las mejores en cuanto a estabilidad política, pero la democracia peruana dispone de mecanismos que garantizan la continuidad del sistema de representatividad popular.
“Y el presidente Vizcarra no ha hecho sino aplicarlos”, puntualizó.
