El presidente de Estados Unidos ha informado este sábado de que Hamza bin Laden, hijo del líder de Al Qaeda, murió en una operación militar de las fuerzas armadas norteamericanas en una zona no revelada entre Afganistán y Pakistán. El 31 de julio varios medios norteamericanos habían revelado la muerte de quien la inteligencia norteamericana consideraba sucesor de su padre al mando del grupo terrorista que perpetró los atentados del 11-S. Se cree que tenía unos 30 años.
Según dijo Donald Trump en el comunicado, «Hamza bin Laden, un alto mando de Al Qaeda e hijo de Osama bin Laden, murió en una operación antiterrorista de EE.UU. en Afganistán/Pakistán. La muerte de Bin Laden no solo priva a Al Qaeda de su liderazgo y la conexión simbólica con su padre, sino que daña de forma muy importante las actividades operativas del grupo. Hamza bin Laden era responsable de planes y conexiones con varios grupos terroristas».
Trump canceló la semana pasada las negociaciones de paz con la guerrilla Talibán, que amparó a Osama bin Laden cuando planificaba los ataques contra Nueva York y Washington en 2001. Durante más de un año, el actual gobierno norteamericano intentó llegar a un acuerdo para poder extraer a aproximadamente la mitad de los 12.000 soldados norteamericanos que están destinados a Afganistán. Los Talibán, sin embargo, siguieron atacando y la semana pasada mataron en Kabul a un soldado de EE.UU.
En 2011, después de una larga búsqueda, un equipo de Navy SEALS de EE.UU. halló y mató a Osama bin Laden en una residencia fortificada en la localidad paquistaní de Abbottabad. Su cuerpo fue lanzado al agua en alta mar. Otros autores ideológicos de los ataques del 11-S, como Khaled Sheikh Mohammed, están desde hace casi dos décadas en una cárcel en la base naval de Guantánamo en la isla de Cuba, a la espera de un juicio que no tendrá lugar hasta al menos 2021.
Bin Laden tuvo varias mujeres y no se sabe la cifra exacta de hijos suyos, ya que muchos huyeron a Irán desde Afganistán después de los atentados del 11-S. Desde 2016 Hamza bin Laden, que vivía oculto, difundió en las redes sociales varios mensajes en los que llamaba a la yihad contra EE.UU. y el resto de Occidente para vengar la muerte de su padre.
El departamento de Estado norteamericano había ofrecido un millón de dólares por cualquier pista que llevara a la captura de Hamza. La corona saudí, que siempre ha querido mantener distancias de la familia Bin Laden, le había retirado al ahora fallecido la nacionalidad, ya que había nacido en Jeddah.