Un fuerte Terremoto de magnitud 7,3 grados sacudió este domingo las Islas Molucas, en el este de Indonesia, creando pánico entre la población, pero sin que se decretara alerta de Tsunami ni se reportaran hasta ahora víctimas o daños.
El sismo se produjo a las 18h28 locales (09h28 GMT) a unos 165 km al sur de la ciudad de Ternate, en las Molucas del norte, y a una profundidad de 10 km, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS).
“El terremoto fue muy fuerte, y lanzó a la gente fuera de sus casas, muchos entraron en pánico y esperan en la calle”, indicó Mansur (quien como es frecuente en Indonesia tiene un solo nombre), un representante local de la agencia de gestión de catástrofes, consultado por la AFP.
Las autoridades evalúan la situación y hasta ahora no había información sobre eventuales víctimas o daños, señaló el responsable.
En la ciudad de Labuha, una de las más cercanas al epicentro, pobladores, presos del pánico, huyeron en motocicletas para refugiarse en tierras más altas, según un colaborador local de la AFP.
“La electricidad se cortó durante el sismo pero luego fue restablecida”, declaró Ihsan Subur, un responsable local de la agencia de gestión de catástrofes, al canal Metro TV. Al menos siete réplicas se registraron tras el terremoto, agregó.
La región de las Molucas fue sacudida por varios terremotos violentos en las últimas semanas, uno de magnitud 6,9 la semana pasada, y otro de 7,3 a finales de junio, sin daños importantes.
Indonesia, archipiélago de 17.000 islas e islotes que se formó por la convergencia de tres grandes placas tectónicas (indo-pacíficia, australiana y euroasiática), se encuentra en el cinturón de fuego del Pacífico, zona de fuerte actividad sísmica.
El año pasado, un sismo de 7,5 seguido de un tsunami en Palu en las islas Célebes, dejó más de 2.200 muertos y miles de desaparecidos.
El 26 de diciembre de 2004, un violento terremoto de magnitud 9,1 azotó la provincia de Aceh, en el extremo oeste del archipiélago indonesio, y provocó un tsunami en todo el Pacífico, que dejó más de 170.000 muertos.