Sábado, 2 de Noviembre del 2024
Luego del dialogo iniciado en diciembre del año pasado, el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) recibió en Marzo las primeras propuestas de asistencia técnica para la ejecución del proyecto Aeropuerto Internacional de Chinchero – Cusco (AICC), presentadas por Corea, España, Turquía, Canadá y Francia, que expresaron su interés en brindar asesoría con la suscripción de un acuerdo de Estado a Estado.
Así, Corea, España, Turquía, Canadá y Francia entregaron sus propuestas técnicas iniciales, las mismas que han sido revisadas por el MTC y se ha definido el alcance de los servicios de asistencia técnica requerida. Con ello, el pasado 9 de abril, el MTC ha invitado a dichos países a desarrollar sus propuestas finales, las que se esperan recibir en mayo. Luego de su recepción, se revisarán y determinará aquella que resulte más ventajosa. Una vez completado ello y cumplidos los pre requisitos exigidos por la Ley de Contrataciones del Estado (Ley 30225), el Gobierno peruano buscará formalizar el contrato de Estado a Estado.
Cabe destacar que los países que han mostrado interés en asistir al Gobierno peruano se ubican entre los primeros 25 países en el ranking de calidad en infraestructura de transportes según el Informe Global de Competitividad 2017-2018 emitido por el Foro Económico Mundial, lo que permitirá la transferencia de conocimientos y la ejecución de una infraestructura de alto impacto regional y nacional.
El acuerdo de Estado a Estado para el aeropuerto de Chinchero permitirá establecer una Oficina de Gestión de Proyecto (PMO, por sus siglas en inglés), de la mano con un Estado que cuente con amplia experiencia en el desarrollo de infraestructura internacional aeroportuaria de primer nivel y altos estándares de calidad y transparencia, lo que permitirá asegurar la ejecución de forma sostenible con el entorno social, ambiental y un adecuado manejo en todas las fases del proyecto.
Es importante reiterar que el apoyo y asistencia que brindará el otro Estado no incluye el otorgarle la ejecución de la obra directamente como viene siendo erróneamente difundido en algunos medios.
La contratación de la obra y supervisión será bajo un proceso de licitación abierto, bajo altos estándares de transparencia y modernos esquemas contractuales. Un reciente ejemplo exitoso de esto ha sido la asistencia del Reino Unido a Perú para el desarrollo de los Juegos Panamericanos. De igual manera la asistencia técnica no involucra otorgarle al otro Estado en concesión la operación y mantenimiento.
Monitoreo arqueológico
Asimismo, respecto a los cuestionamientos sobre los permisos arqueológicos, aclaráramos que un CIRA determina la inexistencia de restos arqueológicos en superficie principalmente por inspección ocular mientras que un Proyecto de Evaluación Arqueológica (PEA) involucra la realización de excavaciones para identificar su potencial arqueológico con fines de identificar presencia de vestigios prehispánicos e históricos.
En 2006 se declaró Patrimonio Cultural de la Nación al Valle Sagrado de los Incas, en la que se encuentra la localidad de Chinchero, razón por la cual el Ministerio de Cultura el 2012 aprobó el PEA del Aeropuerto de Chinchero, lo cual exige un nivel de prudencia hacia nuestro patrimonio cultural aún mayor que la exigida por un CIRA. En el marco del PEA se ejecutaron diversas excavaciones en la zona del futuro aeropuerto en el trazo de caminos secundarios de vinculación inca no habiéndose encontrado vestigios arqueológicos, sin perjuicio de lo cual se recomendó la obtención de un Plan de Monitoreo Arqueológico (PMA) previo al inicio de las obras para salvaguardar el patrimonio arqueológico que pudiese hallarse.
En esa línea, el Ministerio de Cultura el 2016 aprobó el PMA del proyecto y el 2018 el PMA del movimiento de tierra inicial hoy en ejecución, planes a través de los cuales se viene realizando un monitoreo permanente por dos arqueólogos a tiempo completo del contratista, un arqueólogo a tiempo parcial del supervisor y diversas visitas inopinadas de funcionarios del MTC y el Ministerio de Cultura. En ese sentido, el proyecto cuenta con las autorizaciones necesarias y, además, se viene cumpliendo una permanente vigilancia por parte del Estado y el contratista.
Estudio de vientos
Respecto a los cuestionamientos relacionados al estudio de vientos, aclaramos que aun cuando la Regulación Aeronáutica del Perú (RAP) recomienda el uso de al menos cinco años para definir el emplazamiento de la pista, los estudios de preinversión del proyecto analizaron datos de seis años (1981-1985, 2011 y 2013), es decir, un año adicional al sugerido por la regulación aeronáutica nacional e internacional.
Sumado a ello, la OACI -máximo organismo internacional de aeronáutica civil- confirmó al MTC el 2018 que el uso de los datos en los periodos antes indicados no contraviene las normas ni estándares de la aeronáutica internacional para definir el emplazamiento o viabilidad de un aeropuerto. Además, desde octubre del 2015, el MTC tiene instalada una estación meteorológica que toma muestras cada hora y ha continuado aumentando el registro meteorológico que corroboran la tendencia de vientos registrados en periodos anteriores, obteniendo así periodos de información técnica que supera largamente al promedio utilizado y recomendado para estudios en aeropuertos internacionales. Es decir, no solo se hicieron 6 años de monitoreo de vientos, sino que se tienen 3 años adicionales que verifican la tendencia de los datos anteriores completando más de 9 años de información.
La construcción del Aeropuerto de Chinchero brindará mejores capacidades operativas para el acceso vía aérea a la Región Cusco (por ejemplo, tendrá menores restricciones orográficas que en Cusco, se eliminará la contaminación sonora que afectan a la población al encontrarse inmerso dentro del casco urbano, podrá operar en dos sentidos de ingreso y salida, permitirá mejorar los niveles de servicio IATA, entre otros). Todo lo anterior generará una oferta de infraestructura acorde con estándares que promuevan la atracción del turismo, lo que dinamizará su aporte al PBI nacional (hoy superior al 3%).
