(1983 – 2019)
Desde el 13 de marzo hasta el 28 de abril
Galería Galería Germán Krüger Espantoso, ICPNA Miraflores
Horario de visita: de martes a domingo de 11 a.m. a 8 p.m.
Ingreso libre
La exposición es un proyecto de Micromuseo (“al fondo hay sitio”) con la curaduría de Gustavo Buntinx; muestra dos tensiones primordiales que energizan cierto arte peruano de los últimos cuarenta años: la ansiedad política y la inquietud religiosa. En el entrecruzamiento de ambas turbaciones emergen trayectorias incisivas como las de Ángel Valdez (Lima, 1961), figura clave para desarrollos ya históricos, como los del (neo)barroco definitorio de algún horizonte esencial en nuestra contemporaneidad plástica.
En esa gesta cultural hay también un gesto espiritual apenas contenido. Así lo sugiere esta exposición insólita, concebida por Micromuseo como una introspección más que como una retrospectiva. Es una indagación atenta a los sentidos visibles de las obras, pero además a sus agitaciones soterradas, las necesidades interiores del arte, sus involuntarios apremios místicos y sus racionalizaciones múltiples.
Su teodicea, un concepto arduo, en evolución continua desde la creación filosófica del término por Leibniz hace tres siglos. Aquella justificación reflexiva de la existencia de lo Divino deviene hoy una búsqueda angustiada. En tiempos hostiles, es la propia mirada religiosa la que ahora debe justificarse mediante coartadas culturales.
En esas argumentaciones, sin embargo, a veces asoma una pulsión de fe, un esfuerzo por incorporar, por darle cuerpo artístico y propio a las agonías de Dios que hoy demarcan la extinción probable de lo humano. Pero agonía no es muerte sino lucha a muerte contra la muerte misma. Y el Perú ha servido de escenario extremo para esa conflagración espiritual que se somatiza también en lo político.
Y en lo artístico se sublima, de manera no siempre consciente como un síntoma que se desboca. La obra de Valdez se ve hilvanada por las irrupciones religiosas, asociables a crisis íntimas en sintonía dramática con otras, más vastas. Así lo sugieren los cuadernos aquí por primera vez expuestos, donde la narrativa textual se ve perturbada por intervenciones plásticas. Entre ellas, reinterpretaciones prodigiosas de la muerte barroca. De todos los tiempos, los extraordinarios retratos póstumos de las “monjas coronadas” en la tradición virreinal, pero también los cuerpos atrozmente preservados de las momias ancestrales.
La exposición se podrá visitar en la galería Germán Krüger Espantoso ubicada en el ICPNA Miraflores (Av. Angamos Oeste 160) del 13 de ilmarzo al 18 de ab en el horario de martes a domingo de 11 a.m. a 8 p.m.