Lunes, 23 de Diciembre del 2024
El Alcalde de Lima, Jorge Muñoz, y el rector de la Universidad San Marcos, Orestes Cachay, se comprometieron a instalar una Mesa de Trabajo para la construcción del Cerco Perimétrico en la Ciudad Universitaria y dar así por finalizado el impase que tiene más de 9 años sin resolverse.
Ambas autoridades coincidieron en una reunión privada y hablaron brevemente de este problema, luego de lo cual el rector sanmarquino publicó la foto respectiva en la cuenta de Twitter de la Decana de América.
Consultado por la Agencia Andina, Cachay destacó que, en este breve encuentro, Muñoz mostró predisposición para solucionar el problema del cerco perimétrico y confió en que antes de fin de mes pueda instalarse la mesa de trabajo con presencia de ambas instituciones.
Dijo que este tema debe verse lo antes posible, dado que San Marcos será sede de los Juegos Panamericanos, que se inician en el mes de julio. No obstante, reconoció que la nueva gestión edil de Lima está formando sus equipos de trabajo al haberse iniciado su mandato recién el 1 de enero.
El titular de San Marcos recordó que hay varias propuestas para resolver las obras viales pendientes en inmediaciones de la universidad, una de las cuales corresponde a la gestión de Luis Castañeda, según la cual le quitaba 25 mil metros cuadrados a la Ciudad Universitaria. “Eso es inviable”, anotó.
Dijo que otras alternativas son las del Colegio de Ingenieros, que propone quitar 10 mil metros y la de la propia universidad que solo contempla la afectación de 8,000 metros de su terreno. Después de decidir cuál será la más viable, se convocará a un concurso público para la obra, comentó el rector.
“Nuestra alternativa -que costaría más de 4 millones 800 mil soles- es la más viable. Propone tomar unos 5,000 metros de la avenida Universitaria y otros 3,000 metros en la avenida Venezuela, donde se hará una pista auxiliar.
Todo eso suman 8,000 metros, pero no afectará ninguna facultad porque estará al borde de la pista interna a la universidad”, puntualizó.
Indicó que en la mesa de trabajo deberá definir cuál será la alternativa más adecuada para San Marcos, no solo en función de los estudiantes sino de su seguridad. Recalcó además que esta decisión debe estar acorde al trazo final de la línea 2 del Metro de Lima (línea subterránea), la cual tendría un paradero para los sanmarquinos en la avenida Amézaga.
El cerco perimétrico que tenía la universidad fue derribado en el 2008 de manera inconsulta por la gestión de Castañeda Lossio bajo el argumento de la construcción del intercambio vial, hoy paralizado.
Estudiantes de dicha casa de estudios denunciaron que desde que se derribó el cerco perimétrico, la inseguridad aumentó, mientras que el alumbrado público es deficiente en los alrededores, lo que agrava –aún más– la situación de inseguridad.
Diariamente por lo menos 60,000 personas, entre estudiantes y visitantes, ingresan a la sede de San Marcos.
