Ponen en escena en el teatro Blume de Jesús María dos obras del período griego clásico poco conocidas que abordan el papel de las mujeres en la sociedad.
Tras dos años de formación, la 15ª promoción del centro Aranwa se graduará con una puesta en escena doble de teatro clásico: una comedia y una tragedia.
“Me pareció importante escoger obras que tengan algún correlato con nuestra realidad. Es fundamental entender cómo la mujer viene siendo minimizada y dejada de lado en una lucha que viene de antaño, incluso antes de Cristo”, explica el director de las obras, Mateo Chiarella a la Agencia de noticias Andina.
De la risa al llanto
Griegas comienza con Las troyanas, obra situada en el último día de la destrucción de Troya, que se centra en el ensañamiento de los griegos contra la familia real de Troya, especialmente contra las mujeres, que fueron secuestradas. Este drama fue escrito por Eurípides en el siglo IV antes de Cristo.
Luego viene La asamblea de mujeres, comedia de Aristófanes también conocida como Las asambleístas, obra que data de fin del siglo III antes de Cristo.
En esta pieza se cuenta cómo un grupo de mujeres ha decidido que deben convencer a los hombres para que les cedan el control de Atenas.
Creyendo estas que harán un mejor trabajo se disfrazan de sus esposos, se cuelan en la asamblea para hacer la propuesta y hacen todo lo que está a su alcance para conseguir su propósito.
Mujer e historia
El director destaca que Las troyanas habla de esta suerte de éxodo de mujeres luego de la guerra y La asamblea de mujeres, de cómo intentan tomar el control de Atenas en un momento en el que la ciudad no ataba ni desataba. “Son obras para la reflexión”.
“Además, es interesante cómo los autores seleccionaron un momento de la mitología y de la historia, le pusieron la lupa y desarrollaron los vínculos y dramas humanos”, señala.
Quince actores que egresan de Aranwa participan de una corta temporada de ocho funciones.
Chiarella recalca que se trata de una promoción que cuenta con una importante presencia femenina.