Esto se logró tras la única revolución exitosa realizada por esclavos en la historia de la humanidad.
Esas son muchas razones de orgullo para una nación que, desde hace mucho tiempo, encabeza otras listas mucho más dolorosas, según da cuenta el portal de la BBC Mundo.
Sin embargo, por declarar su independencia Haití debió pagar una cuantiosa indemnización al poder colonial del que se liberó, que a la fecha estaría evaluada en 17,000 millones de euros.
Haití fue una colonia rica de Francia durante el siglo XVIII, pero en 1804 se convirtió en la primera nación latinoamericana y caribeña en proclamar su independencia tras una violenta revolución.
Empero, para reconocerla como una nación independiente, Francia exigió el pago de “reparaciones” por 150 millones de francos oro.
Incluso de no aceptarlo, el país no solo seguiría aislado diplomáticamente sino que sería bloqueado por una flotilla de buques de guerra franceses que ya estaba en la costa haitiana.
Esa suma era 10 veces mayor que los ingresos anuales que tenía Haití, que siguió transfiriendo intereses a París hasta 1947. La larga lucha por la independencia les había dado a los esclavos autonomía, pero también había destruido la mayoría de las plantaciones y la infraestructura del país.
Oneroso
Haití debió pedir enormes préstamos a bancos estadounidenses, franceses y alemanes con tasas de interés exorbitantes.
En 1947 Haití terminó de compensar a los dueños de las plantaciones. 122 años le tomó pagar esta deuda.