Cuando se busca un vehículo para ir de la casa a la oficina se suele tener en cuenta la eficiencia del consumo de combustible ya que son viajes que se harán con regularidad. Sin embargo, el tipo de llanta que se escoja también influenciará en el consumo del mismo. Por tanto, es necesario realizar una elección adecuada del tipo de llanta según las necesidades. Factores como diseño, tecnología y compuestos en su elaboración pueden repercutir en la fricción del neumático con la pista forzando al motor a realizar un esfuerzo innecesario.
La elección de una llanta para ciudad
Las llantas de ciudad deben enfocarse en dos aspectos: ahorro de combustible y agarre en superficies secas y mojadas. Ambas características responden a la composición y diseño de la llanta que permita la mayor adherencia al suelo con la menor resistencia posible tanto en superficies secas como mojadas debido a los imprevistos cambios climáticos.
En ese sentido, Goodyear recomienda la adquisición de llantas con especial énfasis en el diseño de la cavidad y la forma de la huella donde ranuras circunferenciales brindan una resistencia mejorada al rodamiento, lo cual conlleva a un ahorro significativo de combustible.
El mantenimiento es importante
Además, si ya se cuenta con las llantas correctas es importante que reciban el mantenimiento adecuado ya que un consumo anormal de combustible puede ser producto de factores como la alineación, desgaste y presión de estas. Por ello, Goodyear, ha recopilado una lista de los principales problemas que pueden surgir y requieren la revisión de un especialista:
Para mantener las llantas en un correcto estado, se recomienda visitar un taller especializado como los Tecnillantas de Goodyear cada 5,000 kilómetros recorridos. De esta forma, se evitan accidentes y se reduce el consumo de combustible del vehículo.