Lima, dic. 4. Unos 100,000 habitantes de Punta Hermosa, Punta Negra, San Bartolo y Santa María del Mar se beneficiarán con la primera planta desalinizadora de Lima, cuya construcción se inició esta mañana en presencia de ministro de Vivienda, Carlos Bruce, y el gerente general de Sedapal, Michael Vega Baltodano.
Al referirse a la obra, Bruce señaló que la ejecución del proyecto “Provisión de Servicios de Saneamiento para los Distritos del Sur” – Provisur forma parte del compromiso del gobierno para cerrar la brecha de la población sin servicios básicos.
Destacó el esfuerzo de Sedapal en la construcción de la infraestructura de saneamiento que se entregará para su operación el 2019 en beneficio de la población de los cuatro distritos del sur de Lima.
El titular de Vivienda indicó que -ante el calentamiento global- plantear el agua del mar como nueva fuente de abastecimiento para Lima es una iniciativa histórica, cuyo inicio de obra no podía retrasarse por más tiempo. Recordó que la buena pro del proyecto se adjudicó en el 2014.
Michael Vega Baltodano, gerente general de Sedapal, reiteró que el objetivo es alcanzar el 100 % de cobertura con una continuidad de 24 horas de abastecimiento de agua potable, por lo que la obra permitirá mejorar la calidad de la población.
La inversión de la moderna infraestructura que se construirá por primera vez en la historia de Lima asciende a 308 millones y se ejecutará en un plazo de 24 meses. Su capacidad de producción será de 400 litros por segundo.
Como parte del proyecto también se construirá una planta de tratamiento de aguas residuales con un caudal promedio de 180 litros por segundo. La disposición final del agua tratada se realizará a través de un emisario submarino de 780 metros de longitud.
¿En qué consiste el proyecto?
El proyecto integral consiste en el diseño, financiamiento, construcción, operación y mantenimiento de dos plantas, una desalinizadora, y otra de tratamiento de aguas residuales, así como la instalación de redes de distribución.
Sedapal asume un reto importante de alto desarrollo tecnológico de convertir el agua de mar en potable a través de los métodos de desalinización. Para la distribución del agua potable y la recolección de las aguas residuales se instalarán 260 kilómetros de tuberías (equivalente a la distancia entre Lima y Paracas), que recorrerán los cuatro distritos que forman parte del proyecto.
La desalinización y potabilización de las aguas del Océano Pacífico será una experiencia extraordinaria considerando que Lima es la ciudad más grande del mundo en medio de un desierto, por lo que crear una nueva fuente de agua es una gran oportunidad.
En mayo del 2014 el ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento suscribió con la empresa Concesionaria Desaladora del Sur S.A., el contrato de concesión por un plazo de 25 años.
El proyecto considera el cumplimiento de las normas ambientales con la mitigación de los impactos durante el proceso de construcción y operación de las plantas desalinizadora y de tratamiento de aguas residuales.