El Servicio Sismológico Nacional, que preliminarmente había dado una magnitud de 6,4, informó que el movimiento telúrico tuvo su epicentro en el estado de Oaxaca, en el sur del país.
Por su parte, el Servicio Geológico de Estados Unidos informó que el más reciente sismo tuvo una magnitud de 6,2 y coincidió respecto al epicentro con el Servicio Sismológico Nacional.
El sismo obligó a parar las labores de búsqueda de víctimas del terremoto anterior, mientras que Protección Civil informó que hasta el momento no se reportan afectaciones en la capital.
Asimismo, un movimiento telúrico de 5,8 grados en la escala de Richter sacudió durante la madrugada el sur de México, sin que por el momento se haya informado de daños o víctimas, indicó el servicio de Alerta Sísmica mexicano (SASMEX).
El temblor se registró a las 05.38 a.m. hora local (misma hora en el Perú) y su epicentro se localizó a 123 kilómetros al sureste de Salina Cruz, en el estado de Oaxaca.
El SASMEX indicó que el seísmo fue “confirmado por 12 sensores” y el sistema de alerta “no generó señal alguna porque la energía desarrollada durante los primeros segundo no supero los niveles establecidos” para ello.
Estos dos movimientos telúricos se producen solo cuatro días después del de 7,1 que afectó a la capital mexicana y que ha causado más de 290 muertos y mientras los equipos de recate siguen buscando víctimas entre los escombros.