El contralor general de la República, Nelson Shack, solicitó a los funcionarios de la alta dirección de ese organismo poner sus cargos a disposición, como parte del proceso de reestructuración que iniciará en todo el sistema nacional de control. Lo propio se hará con los funcionarios de mediana dirección, adelantó el flamante titular del órgano de control, al anunciar, además, que habrá una evaluación a todo el personal de esa institución, a fin de reubicar a los servidores en las áreas en las que más aporten a la Contraloría.
En entrevista con la Agencia Andina, detalló que los reemplazantes en los cargos de dirección –alrededor de 100 funcionarios– serán profesionales con idoneidad y capacidad técnica. “No estamos para contratar a personas que vengan a aprender, sino a especialistas en su rubro. La formación de capital humano estará en la Escuela Nacional de Control, y queremos incorporar a los mejores profesionales para que hagan carrera en la Contraloría”, aseveró.
Sostuvo que su propósito, con medidas de corto y mediano plazo, es recuperar la legitimidad del control, lo que implicará cambios en todo el sistema, integrado por la Contraloría, las oficinas de control interno y las sociedades de auditorías.
Nelson Shack Yalta informó, además, que se realizará una auditoría a la gestión de su antecesor, Edgar Alarcón, para lo cual se instaló ayer una comisión de transferencia que concluirá sus funciones la próxima semana.
El informe que emita, puntualizó, proporcionará una visión más precisa del estado situacional de la Contraloría y permitirá también iniciar las acciones administrativas, si fuera necesario. A nivel de la reestructuración del Sistema Nacional de Control, sostuvo que se busca modernizarlo para que cumpla dos propósitos: luchar contra la corrupción en forma efectiva y mejorar la calidad de las intervenciones públicas.
Indicó, en ese marco, que su gestión le dará un mayor peso a las auditorías de desempeño, que determinan si una obra ejecutada cumple con los propósitos y objetivos de una política pública. “Podemos tener un manejo adecuado de los recursos (auditoría de financiera) y cumplir normas (auditoría de cumplimiento), pero una obra estar mal hecha. El enfoque de desempeño mejora la calidad de las intervenciones públicas que generan los bienes y servicios que la población demanda”, apuntó.
FUENTE. ANDINA