Lima, may. 9. Julio César Uribe festeja hoy 60 años de vida, 19 de los cuales dedicó en cuerpo y alma al fútbol, deporte que le permitió disputar el Mundial de España 1982 y ser catalogado uno de los más ilustres futbolistas peruanos de todos los tiempos a punta de goles, regates de ensueño y elásticas, su sello personal, que hoy en día la ejecutan jugadores como Neymar, Cristiano Ronaldo, entre otros.
Considerado el tercer mejor jugador de América en 1981 y apodado el “Diamante” por su elegancia en el campo, Julio César Uribe jugó en nueve equipos y cuatro países: Sporting Cristal y Manucci de Perú; Cagliari de Italia; Atlético Junior, América de Cali, Independiente Medellín y Envigado de Colombia; América y Tecos de México.
Su técnica atrevida, en un Perú huérfano de artistas del fútbol y alejado de los mundiales hace 36 años, lo mantiene hasta el día de hoy en la cumbre del balompié nacional.
Su fantasía marcó la última época gloriosa de la selección peruana, la que representó en 39 oportunidades y registró nueve tantos. Dos de esos goles sirvieron para que Perú llegara a España 82. Uno de ellos fue ante Colombia, y el otro ante Uruguay, en Montevideo.
Ciudad que lo recibió aquel domingo 23 de agosto de 1981 en su histórico Centenario, donde bailó a la rígida zaga charrúa liderada por Hugo “El Patriarca” de León, coronando su mágica actuación con un gol en la victoria incaica por 2-1.
Julio César Uribe, de 60 años, hacía del fútbol un verdadero espectáculo.