Autoridades electorales francesas alzan el tono tras ataque informático a Macron
Publicado el 06/05/17
París, may. 6. La autoridad electoral francesa adoptó el sábado una línea dura tras el ataque informático contra el candidato centrista a la presidencia, Emmanuel Macron, advirtiendo la víspera de los comicios que cualquiera que difunda los documentos pirateados se expone a sanciones “penales”.
Este pirateo informático que sacudió la recta final de la campaña de cara al balotaje del domingo fue denunciado por el equipo del aspirante proeuropeo como un intento de “desestabilización democrática, similar al que se vio durante la campaña presidencial en Estados Unidos”.
Los documentos inundaron las redes sociales poco antes de la medianoche del viernes, hora del cierre oficial de la campaña electoral.
Los documentos, entre los cuales figuran correos electrónicos y notas de contabilidad, son todos “legales”, pero a estos se añadió “muchos documentos falsos para sembrar dudas y desinformar”, advirtió el equipo del aspirante centrista.
La Comisión Nacional de Control de la Campaña Electoral Presidencial (CNCCEP), que se reunió el sábado, pidió a los medios de comunicación y a los “ciudadanos” “ser responsables” y no difundir el contenido de los documentos para “no alterar la integridad de la elección”.
“La difusión o la reproducción de estos datos, obtenidos de manera fraudulenta, y a los que probablemente se añadieron informaciones falsas, es susceptible de recibir una tipificación penal por varios motivos y que los autores sean considerados responsables” de ello, señaló en un comunicado.
El centrista Emmanuel Macron, que se somete por primera vez al veredicto de las urnas, encara la segunda vuelta de las presidenciales como claro favorito, con 60% de las intenciones de voto, frente a su rival de extrema derecha, Marine Le Pen.
A menos de 24 horas de la apertura de los centros electorales, es difícil medir el impacto de este ataque informático.
La abstención podría alcanzar 30% del electorado, una cifra muy superior a la de anteriores elecciones presidenciales.
Ataques repetidos
Desde su difusión en las redes sociales, estos documentos fueron difundidos ampliamente por cuentas de extrema derecha.
“¿Nos enteraremos de cosas con los #Macronleaks que los periodistas de investigación escondieron deliberadamente?”, escribió en su cuenta Twitter Florian Philippot, mano derecha de Le Pen.
Según WikiLeaks, entre los documentos hay “decenas de miles de correos electrónicos, fotos y archivos adjuntos, fechados hasta el 24 de abril”.
Este sitio fundado por Julian Assange, que copió en su cuenta Twitter el vínculo que lleva a los documentos, aseguró no estar detrás de este ataque informático.
El movimiento de Macron, ¡En Marcha!, ya había sido blanco en marzo de intentos de ataques informáticos, atribuidos a un grupo ruso, según la empresa japonesa de seguridad informática Trend Micro.
Por su parte, el equipo de campaña de Le Pen recurrió el viernes a la comisión de control de la campaña electoral tras haber constatado “irregularidades”.
“Varios electores recibieron en sus casas, a título de propaganda electoral, las papeletas de votación de los dos candidatos a la elección presidencial, y la de nuestra candidata estaba sistemáticamente destrozada, mientras que la de nuestro rival, Macron, estaba intacta”, denunció el director de campaña de la líder ultraderechista, David Rachline.
La recta final de la campaña estuvo también sacudida por el anuncio del arresto la noche del jueves de un presunto islamista cerca de una base militar en Évreux, al noroeste de París.
En el vehículo de este hombre, un exmilitar de 34 años que estaba bajo vigilancia desde 2014 tras haberse radicalizado, las autoridades encontraron una grabación en la que juraba fidelidad al grupo extremista Estado Islámico (EI), así como banderas del grupo yihadista.
En un matorral cercano a la base se hallaton también armas y municiones.
El 20 de abril, tres días antes de la primera vuelta de las presidenciales, un policía fue asesinado en la avenida de los Campos Elíseos, en un ataque reivindicado por el EI.
Francia está en estado de emergencia tras la ola de atentados yihadistas que se cobró 239 víctimas desde 2015.
Más de 50,000 policías serán desplegados el domingo para velar por la seguridad de los electores en todo el país.