Familiares de personas con Alzheimer piden reglamento de ley que favorece a pacientes
Publicado el 18/04/17
Lima, abr. 18. Los familiares de personas diagnosticadas con Alzheimer expresaron su rechazo a las recientes afirmaciones del congresista y médico Bienvenido Ramírez, quien dijo que leer y estudiar propicia el desarrollo de esa enfermedad y pidieron a las autoridades su más pronta acción para que se promulgue el Reglamento de la Ley 30020, que crea el Plan Nacional para la Enfermedad de Alzheimer y otras Demencias.
En un comunicado, este grupo indica que las afirmaciones de Ramírez son el más claro reflejo de la ignorancia al respecto.
“En la experiencia vivida por nuestras familias, la lectura es más bien un aliado en la lucha por mantener activas las funciones cognitivas de quienes padecen la enfermedad. En la empecinada lucha diaria contra el Alzheimer, los familiares nos esforzamos por lograr que recuerden las palabras y su significado. Batallamos para que conserven la esencia de sí mismos. Ellos olvidan, nosotros no los olvidamos”, señala.
En el documento afirman también que el Alzheimer es un mal que no tiene retorno “es para nosotros una escalera hacia abajo difícil de transitar, tanto por nuestros enfermos como por nosotros, porque el deterioro progresivo del que somos testigos nos trae profundo dolor, tristeza y frustración”.
Por todas esas razones, demanda a las autoridades y a la sociedad respeto para las personas enfermas con Alzheimer y respeto por sus familiares.
“Las expresiones desafortunadas del congresista Ramírez no solo demuestran la ignorancia sobre el tema; sino que han hecho evidente un problema mayor: la de las autoridades hacia la compleja realidad de esta enfermedad en el ámbito individual y familiar”, remarca.
Asimismo, piden al presidente de la República y a las ministras de Salud y de la Mujer y Poblaciones Vulnerables la pronta promulgación del reglamento de la ley mencionada, que está en espera desde abril de 2013, por las miles de familias peruanas que tienen familiares con demencia. “El Estado no debe olvidar a los enfermos de Alzheimer”, subraya finalmente.
