La prensa española ha coincidido en destacar el “desastre” que ha supuesto para “un Barcelona irreconocible” la derrota sufrida ante el París Saint-Germain, ayer, por cuatro goles a cero en el enfrentamiento de ida de los octavos de final de la Liga de Campeones.
Mundo Deportivo destaca en su portada el “desastre” del 4-0 frente al PSG y describe al Barcelona como un equipo “sin alma ni juego” que cayó “con estrépito”.
En sus páginas interiores da prácticamente por eliminado al equipo que dirige Luis Enrique. “El PSG arrolló a un Barça sin orgullo, fuerzas ni fútbol que solo puede apelar al mayor milagro europeo de su historia”, describe el diario catalán bajo el título: “Heridos de muerte”.
Sport, por su parte, coincide en señalar que al Barcelona “le faltó alma” en una noche en la que recibió “una humillación
histórica en París”. Su titular de portada reza: “Esto no es el Barça” e indica que el partido “tuvo aroma de final de etapa”, otorgándole un gran mérito a Emery en detrimento de un Luis Enrique que “acabó tocado en lo táctico y en lo psicológico” y que ofreció “su peor versión tanto dentro como fuera del campo”.
Desde Madrid se sigue la misma línea. El diario AS califica de “siniestro total” lo ocurrido en el Parque de los Príncipes donde el “PSG barrió al Barça de principio a fin y dejó la eliminatoria lista”.
Este periódico deportivo resalta la mala noche de Messi con “18 balones perdidos y ningún remate a puerta”, para explicar una “humillación y goleada sin paliativos”. En la crónica del partido se describe al equipo azulgrana como “un dislate táctico, físico y moral” que no tiene “norte alguno” y “con el estilo pisoteado”.
Marca atribuye la victoria al técnico español del PSG. “Emery destroza al Barça”, titula en portada. Sin olvidarse de la gran actuación del exmadridista Di María: “Ángel abre la puerta del infierno”. “Superado en todas las facetas, el cuadro azulgrana quedó virtualmente eliminado donde menos lo esperaba” describe el diario, que salva del “naufragio” al portero alemán Ter Stegen quien “evitó que fuera peor”.