Unión Europea sobrevivirá al Brexit, promete Juncker a eurodiputados
Publicado el 14/09/16
Estrasburgo, set. 14. El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, prometió este miércoles a los europarlamentarios que el Brexit (acrónimo sobre la salida del Reino Unido de la Unión Europea) “no amenaza” la existencia de la UE, pero urgió a todos a trabajar unidos para luchar “contra el populismo”.
“Respetamos aunque también lamentamos la decisión británica [de abandonar el bloque], pero esto no amenaza la UE”, aseguró Juncker, en su esperado discurso anual sobre el Estado de la Unión, el primero desde el referéndum sobre el Brexit de junio y dos días antes de la cumbre de los 27 en Bratislava.
La Unión Europea, sumida en una serie de crisis desde el crash financiero de 2008 -ya sea migratoria o de legitimidad-, se enfrenta a un momento clave para su futuro con la decisión de los ciudadanos británicos de abandonar el bloque, la primera marcha de un país miembro en su historia.
Aunque Bruselas quiere alcanzar “un acuerdo rápidamente para la salida” de Reino Unido, Juncker advirtió que Londres no lo tendrá fácil en su voluntad de permanecer en el mercado interior europeo, pero sin cumplir con la obligación de facilitar la libre circulación de personas.
“No puede haber libre circulación a la carta”, destacó Juncker, quien anunció en un comunicado la creación de un grupo de trabajo para preparar estas negociaciones.
La posibilidad de que los ciudadanos de la UE puedan trabajar e instalarse en otro país del bloque libremente impulsó, durante el referéndum británico, a los partidarios de abandonar la UE, una cuestión que también divide en otros países europeos.
Las divisiones “preparan el terreno del populismo” y este último “no soluciona los problemas al contrario, aporta problemas”, dijo provocando los aplausos del hemiciclo.
Cuartel general único
La fórmula de Juncker para luchar contra el populismo y responder a las preocupaciones de los ciudadanos europeos en materia de seguridad pasa por avanzar hacia una mayor cooperación militar en el seno de la UE y ampliar su plan de inversiones, para reforzar el crecimiento y generar empleos.
“Sin estructura permanente [en materia de defensa] no podemos actuar con eficacia. Será necesario que tengamos un cuartel general único en la UE (…) y orientarnos hacia recursos militares comunes” y complementarios a la OTAN, aseguró Juncker, camisa blanca y corbata azul.
La cuestión de la seguridad centrará la reunión el viernes de los 27 mandatarios europeos en Bratislava, sin la primera ministra británica Theresa May, para reflexionar sobre el futuro de Europa.
La salida de Reino Unido representa también la marcha de una de las principales potencias nucleares y militares de la UE, pero también de uno de los países más reticentes a avanzar hacia un ejército común.
“La defensa y la seguridad pueden ser una salida, pero hay otras (…) La lucha contra la evasión fiscal puede ser un buen principio”, estimó este miércoles, por su parte, el presidente de la Eurocámara, el socialdemócrata Martin Schulz, en una entrevista a varios medios europeos.
Inversión significa empleo
La respuesta de Juncker, en su discurso, fue clara: una Europa más social para luchar contra el desempleo y la optimización fiscal.
“Inversión significa empleos”, subrayó al proponer una ampliación del fondo de inversión de la UE, hasta alcanzar los 630,000 millones de euros (700,000 millones de dólares) para 2022.
Asimismo, anunció dos importantes proyectos de reforma sobre las telecomunicaciones y el derecho de autor, que la Comisión detallará durante la tarde.
Y, aunque rechazó ser un “fanático del librecambismo”, urgió a seguir con los acuerdos comerciales entre la UE y otros países, pese a la actual situación de parálisis en las negociaciones con Estados Unidos.
Jean-Claude Juncker libró en su discurso ante la Eurocámara una primera batalla para recuperar la confianza de los ciudadanos, lastrada recientemente por la polémica sobre Apple y sobre la controvertida contratación de su predecesor José Manuel Barroso por el banco estadounidense Goldman Sachs.
“La Comisión debe asumir la responsabilidad de ser política y no tecnócrata” y escuchar “al Parlamento Europeo, a los Estados miembros y a los ciudadanos”, agregó.