Poetas, cantautores y público en general asiste cada miércoles a encuentros poéticos. Iniciativa civil busca generar espacio para el cultivo de poesía, intercambio y comunidad en torno a esta expresión artística.
Las intervenciones poéticas musicales, como en otrora época, parecen haber regresado a nuestra capital de forma organizada y con una creciente participación de jóvenes. Zejo Cortez, poeta y dramaturgo peruano, que el año pasado presentó su tercer poemario “Tiempo propio” en Europa, tiene en mente generar conciencia y crítica social a través del arte.
“Los recitales poéticos buscan ser un espacio distinto, de reflexión, de crítica de textos y de conciencia social frente a los tiempos difíciles que nos ha tocado vivir”, señala. Miguelcha Gutiérrez, fotógrafo cultural de trayectoria nacional y miembro organizador al igual que Zejo, cree que “esto ha ido tomando su propio ritmo, definitivamente tiene vida y no se hace bajo ningún interés político salvo compartir”.
Las intervenciones suceden cada miércoles en un bar distinto de Lima. Iniciaron actividades en el Queirolo de Lima, la Catedral del Pisco, Don Lucho (o bar de Ciro), Queirolo de Pueblo Libre, Piselli de Barranco, Delfus Bar, La Botica, Superba, en la Posada del Pisco y en el último miércoles fue en el Murphys Irish Pub. El número de asistentes promedia los 50 por fecha entre cantatutores, poetas y público en general.
“Se ha generado un ambiente entrañable, de comunidad”, comentó Milton López, poeta que acompaña la iniciativa desde la primera fecha. Durante las jornadas artísticas, los asistentes de diversos grupos poéticos e individuales, leen textos propios o de otros autores.
Trovadores como Jorge Millones, Enrique Mesías, Lalo Salazar o Coto Arévalo han asistido de forma espontánea por el fin social que enmarca los recitales. También jóvenes cantautores como Cristian Vergara, Vania Bedoya y Alex Darko.
Los recitales se anuncian por eventos en Facebook, en la página de Zejo Cortez los días lunes. Y estos eventos duran, en general de 7:30 PM a 10:30 PM para darle mayor cobertura a los poetas participantes. Con el paso del tiempo, aseguran los organizadores, esperan congregar a más personas, asentarse en un local y, por qué no, hasta llenar un teatro.