Sábado, 2 de Noviembre del 2024
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El Chapo Guzmán se está volviendo calvo y loco por estrés en la cárcel

Publicado el 14/07/16

El capo mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán se está volviendo loco, calvo y farmacodependiente por la “tormenta psicológica” que las autoridades de México le hacen vivir en la cárcel en que se encuentra recluido, dijo este jueves uno de sus abogados.

Tras varios meses de no verlo, José Refugio Rodríguez, abogado del líder del cártel de Sinaloa, acudió recientemente a la cárcel de Ciudad Juárez (norte) para visitar a su cliente, el narcotraficante más buscado del mundo antes de su captura.
“Algo inminente es que Joaquín se está quedando sin pelo en la parte superior de la cabeza. La calvicie es evidente”, dijo el abogado a radio “Fórmula”.
Según Refugio Rodríguez, Guzmán, de 59 años, le expresó su desazón.
“Estoy loco (…) con el trato que recibo, me siento muy mal. Ya un doctor pasó y me dijo que lo que tengo es angustia”, habría dicho el capo a su abogado.
En marzo, el narcotraficante pidió a su defensa agilizar su extradición a Estados Unidos por encontrarse “desesperado” por no poder dormir. Sin embargo, poco después sus abogados presentaron recursos para evitar el traslado a territorio estadounidense.
Guzmán es requerido por una corte de Texas (centro-sur de Estados Unidos) por homicidio, narcotráfico, delincuencia organizada, posesión de armas y lavado de dinero; mientras que en California (suroeste) se le acusa de importar y distribuir cocaína.
Este jueves, Refugio Rodríguez aseguró que su cliente vive “una tormenta psicológica” y que “preferiría que la tortura fuera a golpes”.
Además, el capo –que necesita medicinas para controlar su presión arterial– solicita que se analicen los medicamentos que se le administran en prisión, pues, “ya se siente farmacodependiente”, señaló el defensor.
El Chapo dejó en evidencia al gobierno en julio del año pasado al escaparse por segunda vez de un penal de máxima seguridad. En esa ocasión, a través de un kilométrico túnel cavado bajo la ducha de su celda en El Altiplano, una cárcel a las afueras de Ciudad de México, donde fue recluido nuevamente tras su recaptura el 8 de enero.
En mayo fue transferido inesperadamente a la prisión de Ciudad Juárez.
La semana pasada, el gobierno mexicano hizo pública una foto del narcotraficante en esa cárcel, ante una fuerte ola de rumores en redes sociales de que se había fugado por tercera vez.
(FIN) AFP/RES
GRM


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