Estudiantes que no aprueben con “A” repiten el año
La nueva forma de Calificación Escolar Alfabética apunta a una evaluación más cualitativa de los estudiantes, donde se observe qué van logrando y qué les falta aprender, y no descarta la posibilidad de repitencia en caso sea necesario.
Así lo detalló Verónica Caffo, directora de Educación Primaria del Ministerio de Edicacion (Minedu), quien indicó que esta forma de evaluar se enmarca en el nuevo Currículo Nacional de Educación Básica.
La funcionaria explicó que este sistema ya se venía aplicando desde el 2005 en la educación inicial y primaria de escuelas públicas y privadas, pero desde el año 2017 se extenderá a la educación secundaria.
“Se trata de una evaluación formativa que no solo pone énfasis en el resultado sino en el proceso. Es muy importante para el profesor, el estudiante y los padres de familia porque la evaluación será día a día y no solo al final”, subrayó.
El nuevo sistema de calificación alfabética, que elimina los números y los rojos cuando se desaprueba un curso, es el siguiente: AD (logro destacado), A (logro esperado), B (en proceso) y C (en inicio).
Según Caffo, actualmente cuando un niño obtiene como nota 14 los padres piensan que está “mas o menos” y si sacan 10 se preocupan porque aparece el rojo, pero “esto no les otorga mayor información de lo que el estudiante necesita”.
En cambio, la evaluación expresada de manera alfabética, otorgará mayores elementos para mejorar su aprendizaje, porque se dará mayor énfasis al proceso, no al resultado, refirió.
Actualmente, según el criterio aplicado desde el 2005, no hay repitencia en primer grado de primaria. A partir de segundo grado todos los estudiantes deberán aprobar el año con promedio “A”; si obtienen “C” en cursos prioritarios como Matemática y Comunicación deberán ir a un curso vacacional para lograr las competencias esperadas (“A”); de lo contrario repiten el año.
En los niveles educativos (inicial y primaria) donde ya se viene aplicando esta manera de calificar se ha visto más diálogo entre el docente y el alumno, así como una mayor retroalimentación con los padres de familia. “Ha tenido un efecto positivo, pero todavía hay mucho que trabajar”.
La experta del Minedu añadió que es necesario seguir formando a los maestros para que se adapten al nuevo currículo escolar, que hace énfasis en formación ciudadana, emprendimiento, educación física, arte y lengua extranjera.