Se trataría de un conflicto entre el ejército ucraniano y separatistas prorrusos
Cuatro civiles, incluyendo una mujer embarazada, murieron en el Bombardeo de un puesto de control separatista en el este de Ucrania, anunciaron el miércoles las autoridades rebeldes prorrusas, una información confirmada por periodistas de la AFP presentes en el lugar.
“Cuatro personas fallecieron en el bombardeo, entre ellas una mujer embarazada. Según un primer balance, otras ocho personas resultaron heridas” por disparos de mortero, dijo a la AFP Edouard Bassourine, un portavoz separatista.
Periodistas de la AFP vieron cuatro cuerpos en el lugar donde el miércoles por la mañana se produjo el bombardeo, frente a un puesto de control rebelde en la ciudad de Olenivka, en una zona separatista, a unos 20 km al suroeste de la “capital” rebelde de Donetsk.
El cuerpo de la mujer embarazada se encontraba en el asiento trasero de un vehículo dañado por la metralla. En la mano tenía un celular que no paraba de sonar.
Los periodistas de la AFP vieron también el cadáver de un hombre sentado en el puesto del conductor en otro coche, y otros dos cuerpos yaciendo en el suelo.
Se trata de la pérdida de civiles más grande en varios meses en el este de Ucrania, en donde los combates han cesado relativamente desde que se decretó una tregua en septiembre de 2015.
El drama se produjo en territorio controlado por los rebeldes, pero las autoridades ucranianas niegan cualquier responsabilidad y acusan incluso a la parte adversa.
“No estamos implicados en esta tragedia y contemplamos dos posibilidades: o los rebeldes dispararon contra los vehículos o una mina terrestre estalló”, dijo a la AFP Anton Mironovitch, un portavoz militar ucraniano.
Según los periodistas de la AFP, los huecos en el suelo no corresponden a los de explosiones de minas terrestres y parecen más bien impactos de obuses.
El conflicto entre el ejército ucraniano y separatistas prorrusos ha dejado cerca de 9.200 muertos desde que estalló hace dos años.