Con una feria gastronómica inclusiva y shows artísticos
Una gran fiesta se vivió en la céntrica Plaza Casanave donde decenas de niños con habilidades diferentes celebraron el Día Internacional del Síndrome de Down y Autismo gracias a la Oficina Municipal de Atención a la Persona con Discapacidad (OMAPED) de la Municipalidad del Callao.
Los momentos más emotivos fueron cuando los niños interpretaron canciones de sus artistas favoritos y luego bailaron las pegajosas músicas de ahora como “Mueve el Toto”.
Además, en el lugar se realizó Arte Terapia al Aire Libre, donde los niños y jóvenes podían hacer dibujos y pinturas según su creatividad para fortalecer sus habilidades. También se preparó un show infantil donde hubo muchos juegos y sorpresas para los menores.
Una de las sorpresas más gratas fue la Feria Gastronómica Inclusiva, donde padres e hijos ofrecían sus platos elaborados con bastante cariño para el público. Como era de esperarse, el ceviche fue la comida que más salió, seguido por el arroz con pollo, papa a la huancaína, anticuchos, torta de chocolate y picarones.
Matilde Sánchez, gerente de OMAPED Callao, informo que estas actividades se realizan de manera permanente porque es muy importante entablar una fuerte comunicación con estos niños para que sus habilidades se desarrollen y puedan ser grandes personas a futuro.
“Gracias a la gestión del alcalde Juan Sotomayor, estos niños aprenden muchas cosas en sus talleres. Siempre conversamos con ellos, los ayudamos, los hacemos participes de nuestras actividades y sobre todo confiamos en ellos. Nos demuestran que su discapacidad no es incapacidad. Son ejemplos a seguir”, dijo la funcionaria.
Asimismo, entidades públicas como el Registro Nacional de Identidad y Estado Civil (Reniec), Defensoría del Pueblo y el Consejo Nacional para la Integración de la Persona con Discapacidad (CONADIS) apoyaron el evento con consultas e información sobre los servicios y la ayuda que brindan. La Asociación Latinoamericana de Gastronomía y Afines (ASLAGA) también participo del evento para que los padres de familia puedan inscribir a sus hijos para cursos de cocina.