“Es un gran día para mí, muy emotivo”, celebró el número 7 del Bayern, de 32 años, después de poder ejercitarse con carreras, pases y ejercicios de tiro a portería.
“Ha sido mi primera lesión tan larga, una situación difícil para mí”, comentó el jugador al término de la sesión, donde no participó en el final de la misma, en un breve partido entre los integrantes del plantel.
“El fútbol es así, la vida es así. Lo importante es no bajar la cabeza y trabajar duro”, apuntó.
Ribery se venía ejercitando en solitario hasta ahora.
El pasado 30 de octubre incorporó ya el golpeo de balón en sus entrenamientos.
El francés disputó su último partido el 11 de marzo, en la Liga de Campeones ante el Shakhtar Donetsk (7-0). Se lesionó en el tobillo derecho y en esta temporada su lugar en el ataque de los bávaros lo está cubriendo el brasileño Douglas Costa.
La lesión de Ribery parecía sin mucha gravedad al principio, pero la recuperación fue retrasándose y en junio necesitó que su pie quedara inmovilizado.
Todavía no se ha avanzado una fecha para el regreso a la competición, pero el jugador avanzó su intención de poder estar para la decimosexta jornada de la Bundesliga, el 12 de diciembre ante el Ingolstadt.
El Bayern es actualmente líder de la liga alemana, con ocho puntos de ventaja sobre el segundo, el Borussia Dortmund.