Corrupción, Pobreza y mal funcionamiento de la justicia dificultan la adhesión de Perú a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), dijo el jefe de su División de Gobernanza, el alemán Martin Forst. “Pienso que (la corrupción) es un verdadero problema, tanto por los peruanos como para acercarse a la OCDE”, consideró Forst, en entrevista con Agence France-Press (AFP) tras finalizar una misión en Lima. Perú aspira a convertirse en miembro de la OCDE —el denominado club de los países desarrollados— para el 2021, fecha en que se cumplen 200 años de su creación como república. Pero aún le falta sortear varios escollos.
“En Perú, todo el sector de la justicia no está funcionando bien, es un área que necesita muchas reformas”, agregó Forst, aunque aclaró que su informe estará centrado en el trabajo del Poder Ejecutivo. Mientras tanto, se están trabajando en las áreas de integridad, compras públicas, políticas regulatorias y desarrollo económico y social. Explicó que el país aún no ha empezado a trabajar con la OCDE en la reforma del sector judicial, “pero sería necesario en el largo plazo, porque en la hoja de ruta para la OCDE es vinculante que las instituciones judiciales sean efectivas”.
El gobierno peruano declaró esta semana de interés nacional las acciones para el ingreso de Perú en la OCDE, organización de 34 países donde figuran Estados Unidos, Francia y Suiza, además de dos latinos: México y Chile. En coordinación con la OCDE ha iniciado un ‘Programa País’, para analizar las brechas y recomendaciones que debe superar para conseguir su objetivo. La gestión del mandatario Ollanta Humala aspira a que la pretensión se convierta en un objetivo de Estado y que continúe con su sucesor.
Para Martin Forst, es una buena idea estratégica de Perú haber iniciado un proceso de acercamiento con la OCDE. Este importante productor mundial de materias primas lleva más de dos décadas de crecimiento económico ininterrumpido. “Pensamos que Perú necesitará grandes cambios. Es claro que hay un buen crecimiento económico, todos lo sabemos, y que hay progreso en la modernización del Estado. Pero también sabemos que hay problemas como pobreza”, detalló.
En Perú la pobreza extrema cayó a 4.3 por ciento, aunque se encuentra aún por encima del 3 por ciento que señala el Banco Mundial como el nivel en que se considera como erradicada. En tanto, la pobreza en Perú retrocedió a 22.7 por ciento en 2014, de la mano de los programas sociales estatales, aunque la reducción ocurrió a un ritmo menor que en el año previo, en medio de una desaceleración económica global. Martin Forst le hizo algunas recomendaciones al primer ministro peruano, Pedro Cateriano Bellido, sobre la labor del Poder Ejecutivo.