Este lunes, la Comisión de Ética independiente de la FIFA inhabilitó por siete años al ex presidente de la ANFP, Harold Mayne-Nicholls, sospechado por irregularidades en la definición de las sedes de los mundiales de Rusia 2018 y Qatar 2022.
En el sitio oficial de la máxima entidad del fútbol se explica que la sanción se debería a una supuesta violación del artículo 36 del Código de la FIFA.
“Los miembros del Comité de Ética y los miembros de las secretarías velarán que todo lo divulgado a su favor durante el ejercicio de sus funciones siguen siendo confidenciales, en los hechos particulares del caso, el contenido de las investigaciones y deliberaciones y decisiones tomadas, así como datos de carácter personal privada de acuerdo con el Reglamento de protección de datos de la FIFA”, explicó el comunicado.
Al mismo tiempo que aclaró: “igualmente, los miembros del Comité de Ética no hará ninguna declaración relacionados con procedimientos en curso tratados. Sólo las resoluciones firmes ya notificadas a los destinatarios podrán hacerse públicos”.