Estados Unidos y Cuba restablecen relaciones diplomáticas y reabren embajadas
Publicado el 20/07/15
Washington, jul. 20. Estados Unidos y Cuba reanudaron formalmente hoy sus relaciones diplomáticas, y la bandera cubana volvió a ondear en el departamento de Estado en Washington, un histórico gesto que pone fin a décadas de hostilidades entre los dos rivales de la Guerra Fría.
El estandarte cubano -rojo, blanco y azul con una estrella solitaria-, se sumó al resto de banderas de otros países que ondean fuera del edificio en Washington, constató un fotógrafo de la AFP.
Las relaciones diplomáticas se restablecieron de forma oficial en el primer minuto de este lunes, y las secciones de intereses de Estados Unidos y Cuba se convirtieron en embajadas de pleno poder en ambos países a esa hora.
El cambio histórico entre los dos adversarios se ha producido a un ritmo vertiginoso, y en cuestión de meses las dos partes acordaron enterrar la hacha de guerra y trabajar juntos.
El restablecimiento de las relaciones se produjo después de que Washington reconociera que su política de provocar cambios en Cuba mediante el aislamiento y el embargo había fracasado.
La bandera cubana se sitúa ahora entre los estandartes de Croacia, a su izquierda, y de Chipre, a la derecha.
Y por primera vez desde 1961, cuando ambos países rompieron sus relaciones diplomáticas, la bandera también se colocó en la misión diplomática de La Habana en Washington, elevada al rango de embajada.
El secretario de Estado norteamericano, John Kerry, recibirá hoy a su homólogo cubano, Bruno Rodríguez, para mantener conversaciones en Washington, y Rodríguez presidirá una ceremonia en la embajada cubana, situada a pocas manzanas de la Casa Blanca.
El acercamiento entre Estados Unidos y Cuba fue anunciado el pasado 17 de diciembre, cuando el presidente estadounidense, Barack Obama, y el líder cubano, Raúl Castro, acordaron normalizar plenamente sus vínculos.
Tras una serie de negociaciones entre la Habana y Washington, las relaciones diplomáticas se reanudaron apenas siete meses después.
Cuestiones por resolver
Ambos países aseguraron que el paso dado hoy sólo es el comienzo, y que no será sencillo acabar con décadas de enfrentamiento.
Uno de los principales motivos de conflicto entre Cuba y Estados Unidos, es el embargo económico instaurado desde 1960 sobre la isla. Raúl Castro pidió a Obama que utilizara sus poderes ejecutivos para desmantelarlo.
Sin embargo, en Estados Unidos, algunos republicanos se han mostrado muy críticos con la política de Obama respecto a Cuba.
El senador Marco Rubio, candidato a las presidenciales de 2016 e hijo de inmigrantes cubanos, mostró su intención de cortar los vínculos diplomáticos con “una tiranía comunista anti-estadounidense”.
“Ese reconocimiento envía el mensaje a los disidentes y más gente en todo el mundo de que Estados Unidos acepta la forma de gobierno de Cuba como una forma legítima de gobierno”, declaró en la CNN.
Otro escollo en las relaciones es la compensación por los bienes estadounidenses que confiscó Cuba tras la revolución liderada por Fidel Castro en 1959. En Estados Unidos se presentaron unas 5,900 demandas por ese motivo y se estima que las indemnizaciones podrían alcanzar entre 7,000 y 8,000 millones de dólares.
Washington presiona, además, para mejorar la libertad de expresión, de religión y de prensa en la isla, y pide la extradición de varios fugitivos estadounidenses.
Una de esas fugitivas es la antigua integrante del grupo radical Black Panther, Joanne Chesimard, a la que la justicia busca por el asesinato de un policía en Nueva Jersey en 1973 y que se esconde en Cuba desde 1984.
Las negociaciones acabaron con otro de los obstáculos, dijo la representante estadounidense para América Latina, Roberta Jacobson, que explicó que los diplomáticos estadounidenses podrán desplazarse libremente por Cuba, tras notificar su viaje a la isla.