El equipo del Tata Martino mostró dos caras diferentes. Claro protagonista en el primer tiempo, se desordenó en el segundo y le dio la pelota al rival que lo empató.
La presentación de Argentina en el Grupo B de la Copa América no fue exactamente lo que Gerardo Martino esperaba. Dos caras diferentes de un mismo equipo que, en el primer tiempo fue agresivo, ordenado, que presionó siempre en campo rival y que supo defenderse con la pelota en los pies y en el complemento cedió el control y no supo cómo marcar ni cerrar los avances del rival.
En apenas ocho minutos, Agüero, Di María, Pastore y alguna subida de Nico Otamendi, obligaron aParaguay a retroceder y jugar cerca de su arco. A los 13 minutos, la primera situación llegó en los pies deFideo , que casi mete el 1-0 con un gol olímpico.
Hasta los 28′ del primer tiempo, Messi no había tenido grandes conexiones con la pelota, pero su mera presencia forzó el error de Samudio para el que sería el primer tanto del partido. Nervioso por tener a Leo en sus espaldas, el defensor guaraní dio muy mal un pase atrás y apareció el Kun Agüero a toda velocidad para eludir a Silva y definir con el arco a su merced. Así, el máximo artillero de la Premier League abrió el marcador con un tiro cruzado, convirtiendo su gol 28 en 62 encuentros con la Albiceleste .
Seis minutos después, a los 34, fue el propio Samudio quien cruzó a Di María en el área y, aunque la jugada fue algo dudosa, Wilmar Roldán no dudó en cobrar penal para la Selección de Martino. Messi, encargado de patearlo, demostró que pueden hacerse golazos desde los 12 pasos. La Pulga le pegó esquinado al palo izquierdo de Silva, que pudo adivinar hacia donde iría pero no logró llegar porque el tiro de Leo fue impecable.