Brisbane,Australia,20/03/2015(
Los investigadores, liderados por los científicos Jürgen Götz y Gerhard Leinenga, utilizaron una prueba de ultrasonido combinada con microburbujas inyectadas en la sangre de ratones con alzhéimer. Estas vibran en reacción a las ondas emitidas con el objetivo de abrir temporalmente la barrera protectora de sus cerebros y erosionar la placa betamiloide. “Las ondas de ultrasonido oscilan tremendamente rápido, activando las células de la microglía que digieren y eliminan las placas amiloides que destruyen las sinapsis del cerebro [la cual es causante de la enfermedad neurodegenerativa]”, explica Götz.
De esta forma y aplicando la técnica durante semanas, consiguieron eliminar en un 75% las placas betamiloides sin causar daños en el tejido cerebral y lograr una notable mejoría en la memoria, orientación y reconocimiento de objetos de los sujetos (los ratones tratados con ultrasonido puntuaron significativamente mejor que aquellos que no recibieron tratamiento y la diferencia con ratones sanos fue mínima).
El equipo de especialistas afirma que el próximo paso de la investigación será aplicar la técnica a animales más desarrollados, como las ovejas, y espera poner en marcha sus proyectos aplicados a humanos en 2017.