Judíos muertos en supermercado de París serán enterrados en Israel
Publicado el 12/01/15
París, ene. 12. Los cuatro judíos muertos el viernes en la toma de rehenes cometida por el yihadista Amedy Coulibaly en un supermercado kósher en París serán enterrados mañana martes en Israel, anunciaron fuentes coincidentes.
“Las cuatro familias han decidido enterrar a sus muertos en Israel. Las exequias tendrán lugar el martes“, dijo a la AFP una fuente de la comunidad judía.
El Instituto Médico Legal entregará el lunes los cuerpos de las cuatro víctimas del supermercado: Yohan Cohen, Yohav Hattab, Philippe Braham y François-Michel Saada, agregó la fuente.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, “respondió a la petición de las familias de las víctimas” y pidió a los responsables gubernamentales que ayuden “a repatriar [los cuerpos] a Israel”, según un comunicado de su oficina.
Un responsable israelí, que participó el domingo en una reunión para planificar los funerales, precisó a la AFP que estos tendrán lugar a las 11H00 GMT del martes en el cementerio del Monte del Descanso de Jerusalén. Previamente, la fuente de la comunidad judía había informado de un lugar y una hora diferentes.
El jefe del ejecutivo israelí participó en la víspera en París de la manifestación contra los atentados perpetrados esta semana por yihadistas en Francia, a la que acudieron decenas de dignatarios internacionales.
Yohan Cohen, que trabajaba en la tienda kósher atacada en Porte de Vincennes en París, era originario de Sarcelles, una localidad ubicada al norte de París, que en julio fue escenario de violentas manifestaciones antisemitas durante la guerra de Israel contra Hamas en la Franja de Gaza.
Las tres otras víctimas, que eran judíos practicantes, habían ido al supermercado para hacer las compras antes del inicio del sabbat, día sagrado de descanso semanal en el judaísmo.
Entre las víctimas está el ciudadano tunecino Yohav Hattab, hijo del rabino de la sinagoga de La Goulette en Túnez, cuyo padre lo había enviado a estudiar a Francia, porque pensaba que estaría más seguro.