Real Madrid se afianzó en la punta de la Liga española luego de ganar sufriendo al Córdoba (2-1), en un duelo donde Cristiano Ronaldo vio la roja por golpear y ante esto Gareth Bale tuvo que salir al rescate del equipo.
A los dos minutos, Ghilas abrió la cuenta para el Córdoba a través de un penal. Luego de una mano en el área de Sergio Ramos, el árbitro no dudó en pitar la infracción y el atacante no perdonó en el cara a cara con Casillas.
El equipo blanco, sin Isco por lesión, carecía de imaginación y frescura para desenvolverse ante la fuerte presión cordobesista y solo era capaz de crear peligro a balón parado.
Así llegó el empate, en el minuto 26, tras un saque de esquina botado por el colombiano James Rodríguez desde la derecha, que peinó Bale y remató el francés Karim Benzema desde el suelo en el área pequeña para alojar el balón en el fondo de la red.
En la segunda parte, las pocas ocasiones terminaban por desquiciar al Madrid. Sobre todo aCristiano Ronaldo, que culminó su desastroso partido con una roja por patear al brasileño Edimar.
Sin embargo, cuando parecía que el partido acabaría en tablas y el Córdoba arrancaría un justo empate ante el líder, una falta botada por Bale se estrelló en la mano de Fede Cartabia que el colegiado consideró penalti y que también supuso la expulsión del argentino.
La pena máxima la anotó el propio Bale, que, de esta manera, daba el triunfo al conjunto madridista en el final del partido y dejaba rota la ilusión cordobesista de lograr puntuar ante el líder de la liga española.