Por: Pepita Albarracín, dermatóloga de la Clínica Maison de Santé
En verano realizamos más actividades a la luz del día, lo que representa un aumento de la incidencia de quemaduras solares y cáncer de piel debido a la exposición al sol, por lo que resulta importante protegerse y evitar el daño solar.
Se debe usar sombreros, gorros, ropa adecuada, evitar exposición solar -especialmente de 10 am a 4pm- y recurrir al uso de protectores solares.
Existen muchos productos bajo esta denominación, pero es importante elegir el adecuado según receta médica. Se debe tener en cuenta el factor de protección solar (FPS) o el tiempo que un protector solar se mantiene activo en la piel para protegerla de la radiación ultravioleta evitando así las quemaduras solares.
Se denominan FPS más o menos 50. Así, en pieles muy blancas, fotosensibles se debe escoger un FPS 50+, de lo contrario FPS 50- es suficiente.
Además, considerar si la piel es seca, mixta o grasa, pues existen protectores o bloqueadores solares en crema, gel y/o fluido. Existen también los Bloqueadores Solares especiales para niños. Estos productos son una ayuda al conjunto de medidas que se toma para evitar las quemaduras solares y el daño por radiación ultravioleta, es por ello que solo el uso de bloqueadores o protectores solares no es suficiente.
Las industrias farmacéuticas desarrollan nuevas tecnologías y sustancias para tener un bloqueador solar ideal suficiente que evite desde muy pequeño el efecto nocivo de los rayos solares. El uso de bloqueadores solares únicamente esta prescrito por los dermatólogos.