Un magistral Sergio Agüero salvó al Manchester City de una eliminación casi segura de la Liga de Campeones al anotar los tres tantos de su equipo en la victoria por 3-2 sobre el Bayern Múnich, que permite al conjunto inglés seguir soñando con el pase a los octavos de final.
Alentados por el empate entre CSKA Moscú y Roma, los hombres de Manuel Pellegrini afrontaron el partido sabiendo que un triunfo y otro en Roma dentro de dos semanas les clasificaba para la siguiente fase.
El Bayern comenzó el choque con las señas típicas de los conjuntos de Pep Guardiola: dominio del balón y control de juego, mientras que el City saltó al césped del Etihad Stadium con cinco centrocampistas y Agüero solo en punta, buscando la velocidad del “Kun” y las internadas de Jesús Navas.
Los de Pellegrini vivían del argentino, que no cesaba de pelearse con la zaga visitante. Y así llegó la jugada que cambió el partido: a los 20 minutos, el marroquí Mehdi Benatia derribó dentro del área al internacional argentino, que se había plantado solo ante la meta de Manuel Neuer.
Penal y expulsión. El propio Agüero anotó desde los once metros con un disparo ajustado y preciso a la derecha del arquero germano.
Guardiola, entonces, quitó a un centrocampista (Rode) y dio entrada a un defensa (Dante), lo que sirvió para que los de Pellegrini se hicieran con el esférico y dejaran al Bayern a expensas de Lewandowski, Robben y Ribery, quienes fueron de más a menos en el choque.
Remontada alemana
Sin embargo, con un futbolista menos y cuando más se aproximaba el segundo tanto local, llegó la remontada del equipo bávaro. A los 40 minutos, Xabi Alonso, el día de su 33 cumpleaños, sorprendió a Joe Hart con un preciso lanzamiento libre, raso y al palo del portero, engañando a todos, especialmente a Hart.
Cinco minutos tardaron los de “Pep” en culminar la remontada, ya que segundos antes del descanso el polaco Lewandowski se coló entre Kompany y Sagna para cabecear fuera del alcance de Hart un preciso centro de Boateng desde la derecha y subir el 1-2 al marcador.
La segunda mitad fue un monólogo de los de Pellegrini, quien buscó el tanto del empate dando entrada al montenegrino Stevan Jovetic, autor de un gol el pasado fin de semana en la Premier League.
Y el gol llegó a falta de cinco minutos para la conclusión: Agüero, el único que podía salvar al City, aprovechó un error en la entrega de Xabi Alonso para plantarse solo ante Neuer y definir sutilmente a la izquierda del arquero alemán.
Mientras los aficionados presentes en el Etihad celebraban el empate, llegó el éxtasis para la hinchada local. De nuevo el “Kun”, el jugador del partido, provocó un nuevo error en la defensa visitante para anotar su tercer tanto y permitir que su equipo siga soñando con el pase a octavos de final de la Liga de Campeones.