Naciones Unidas, set. 22 El secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, instó a los líderes mundiales que se reunirán el próximo martes en este organismo a escuchar el reclamo de los pueblos de actuar contra el cambio climático.
En declaraciones a la prensa durante su participación en la marcha climática de Nueva York, una de las dos mil 700 celebradas en 162 países, el diplomático reiteró la urgencia de enfrentar amenazas como el calentamiento global.
“Uno de los temas clave de nuestra época es el cambio climático, y no hay tiempo que perder. Si no actuamos ahora, pagaremos un precio muy alto, por lo que espero que los líderes convocados para el 23 de septiembre reflejen la fuerza, la energía y las voces de quienes han marchado hoy”, advirtió.
Ban se sumó a la movilización que recorrió calles y avenidas de Manhattan, donde se ubica el cuartel general de la ONU, sede del evento al cual han confirmado su asistencia más de 120 jefes de Estado o de Gobierno para sentar las bases destinadas a buscar un convenio climático global en 2015.
Millones de personas demandaron en las principales ciudades del mundo un desarrollo socio-económico equitativo y en armonía con la naturaleza, en un contexto marcado por el peligro de la elevación del nivel del mar y del aumento de los eventos climáticos extremos.
Estoy sorprendido gratamente por la fuerza mostrada por los pueblos en momentos en los que llegó la hora de actuar, no tenemos un plan B, porque no existe un planeta B, dijo Ban a periodistas.
El Secretario General ha expresado sus expectativas de que en la cumbre del martes próximo los mandatarios asuman un compromiso capaz de llevar al establecimiento de un marco legal para enfrentar el cambio climático, informó Prensa Latina.
Varias conferencias y reuniones celebradas en los últimos años han representado pocos avances para combatir un problema que expertos han identificado como una amenaza para la humanidad.
Países del Sur atribuyen los fracasos a la falta de voluntad de potencias industrializadas para establecer un compromiso universal, que garantice el desarrollo sustentable sin las grandes brechas entre ricos y pobres existentes en la actualidad.